Última jornada maratoniana en la Knesset. El Parlamento israelí se embarca en unas horas ajetreadas en las que sus legisladores intentan promover el máximo de leyes posibles antes de que se disuelva la cámara legislativa a medianoche. Mientras, el país se prepara para sus quintas elecciones en tres años tras el fracaso del “gobierno del cambio” anunciado hace una semana por sus impulsores. Durante este miércoles, también se realizará el voto final sobre el proyecto de ley que disuelva la Knesset. 

Cuando den las 12, el Parlamento israelí perderá la capacidad de aprobar legislación hasta que se forme un nuevo Gobierno. A partir de esa hora, el cargo de primer ministro se transferirá automáticamente al ministro de Relaciones Exteriores, Yair LapidUn año y 17 días ha durado en el cargo el aún primer ministro, Naftali Bennett. Después de 12 años de gobierno ininterrumpido del ahora jefe de la oposición, Binyamín Netanyahu, su Ejecutivo prometía estabilidad y cambios.

“Por encima de los desacuerdos ideológicos”

“Ha sido un gobierno excelente que se basaba en una coalición complicada, y aquí en esta sala hay un grupo de personas que supieron dejar de lado los desacuerdos ideológicos, elevarse por encima de ellos y trabajar por el estado de Israel”, recordaba Bennett en el último gabinete convocado este domingo. En abril, perdieron la frágil mayoría parlamentaria de 61 apoyos. A partir de ahí, todo fue cuesta abajo para la débil coalición formada por ocho partidos políticos de todos los colores, unidos por su deseo de echar a Netanyahu.

Finalmente, la hizo caer el voto para extender una ley que otorga a los colonos de Cisjordania un estatus legal especial. La “situación de emergencia” en los territorios ocupados permite, desde 1967, que los colonos que viven en Cisjordania sean gobernados por la ley civil, y no la militar que se aplica sobre los palestinos. Este estatus legal otorgado a los colonos les da los mismos derechos que la ciudadanía israelí que vive en territorio soberano. Aunque hay un consenso mayoritario a favor de mantener la separación de estos dos sistemas, los intereses de la oposición para hacer caer al gobierno la hicieron votar en contra de su ideología.

Comicios de otoño

La prisa por disolver la Knesset se explica por esta votación que lo hizo tambalear todo. Esta ley de colonos sigue vigente y no expira si el gobierno se derrumba pero eso debe ocurrir antes de su fecha límite: este jueves 30 de junio a medianoche. Además, Bennett y Lapid quieren evitar que Netanyahu forme un gobierno alternativo. Por ahora, se barajan dos fechas para los nuevos comicios: el 25 de octubre, día preferido por el bloque de la oposición religiosa, o el 1 de noviembre, jornada predilecta por los partidos de la coalición y la formación opositora árabe, la Lista Conjunta. 

Durante la última jornada de la 24ª Knesset, los legisladores deberán decidir el día para sus comicios de otoño, los quintos desde el 2019. Antes tendrán que decidir algunas leyes controvertidas, como la propuesta por el Likud de Netanyahu para aumentar el gasto público para las campañas electorales. También se debatirá el proyecto masivo de un metro para Tel Aviv y sus suburbios, y las reformas para que Israel entre en el Programa de Exención de Visas de los Estados Unidos.