Tras varias semanas de cruce de declaraciones, Francia ha pasado a la acción. El Ministerio del Mar francés anunció durante la noche del miércoles al jueves medidas sancionadoras contra dos barcos pesqueros británicos. Uno de ellos recibió una multa por "dificultar un control" y el otro, que "no figuraba en la lista de licencias dadas al Reino Unido", fue obligado a cambiar de ruta y lo llevaron hasta el puerto de Le Havre (noroeste del territorio francés), donde sigue retenido este jueves.

Representan las primeras acciones de represalia adoptadas por la Administración gala contra barcos pesqueros del Reino Unido, acusado de no respetar el acuerdo del Brexit en esta materia, algo que las autoridades británicas niegan. De hecho, el Ejecutivo liderado por Emmanuel Macron ya había advertido el miércoles al mediodía que "prohibiría el desembarco de productos del mar británicos" si Londres no cambiaba su posición.

En concreto, amenazó con "una prohibición del desembarco de pesqueros británicos" en los seis principales puertos franceses de la costa atlántica, con un "refuerzo de los controles aduaneros y sanitarios" de los barcos y con controles más restrictivos de los camiones procedentes o con destino a Reino Unido. Estas medidas entrarían en vigor el 2 de noviembre.

París acusó durante las últimas semanas a Londres de incumplir los acuerdos firmados el año pasado. Le reprochaba que no concediera a los pescadores franceses las licencias fijadas por el pacto comercial post-Brexit, cuyo capítulo sobre la pesca fue uno de los más difíciles de acordar. Las autoridades británicas anunciaron a finales de septiembre que habían otorgado 12 licencias de pesca, de las 47 pedidas por Francia, a pesqueros franceses de menos de 12 metros. La isla de Jersey, una dependencia de la corona británica pero que dispone de un gobierno autónomo, también rechazó 75 licencias pesqueras a embarcaciones galas. Unas medidas que colmaron la paciencia de las autoridades francesas.

"Lenguaje de la fuerza"

"Ahora debemos hablar el lenguaje de la fuerza, ya que me temo que, por desgracia, el Gobierno británico solo entiende las cosas así", ha asegurado el ministro francés de Asuntos Europeos, Clément Beaune, sobre las recientes medidas de represalia adoptadas por Francia. Según el acuerdo post-Brexit, los pescaderos europeos pueden acceder a las aguas británicas si demuestran que ya explotaban esos recursos en el pasado. En el caso de las pequeñas embarcaciones, sin sistemas de geolocalización, les resulta más difícil aportar las pruebas de ello. Según las autoridades galas, Londres se aprovecha de ello con mala fe y les deniega las licencias.

"No podremos avanzar con ningún otro aspecto de la cooperación europea con el Reino Unido sin restablecer la confianza y aplicar plenamente los acuerdos firmados", ha defendido Beaune. "Obviamente es decepcionante y nuestro país ha cumplido con todas sus obligaciones" del acuerdo post-Brexit, ha declarado, por su lado, la ministra del Interior británica, Priti Patel, informa Begoña Arce.

La disputa pesquera resulta un asunto especialmente sensible en Francia, teniendo en cuenta el rol simbólico de este sector y el actual contexto de precampaña de las elecciones presidenciales de 2022. No obstante, aquello que más preocupa a Londres y Bruselas sobre las turbulencias post-Brexit es el protocolo de Irlanda del Norte, que el ejecutivo de Boris Johnson quiere renegociar.

Estas discrepancias pesqueras se producen en un momento de tensión entre París y Londres, alimentado también por otras cuestiones. Además del acceso de pescadores franceses a las aguas británicas, ambos ejecutivos discrepan por la llegada de migrantes al territorio británico a través del canal de la Mancha, que este verano alcanzó cifras récord y de la que Londres responsabiliza a París, pese a los duros controles policiales en la zona de Calais. Sus vínculos también se deterioraron por la crisis de los submarinos y la firma del pacto AUKUS entre Canberra, Washington y Londres. Las singulares relaciones franco-británicas no pasan por su mejor momento.