La Policía italiana desalojó con cargas, mangueras de agua y gases lacrimógenos a los varios cientos de manifestantes que desde hace días protestan en una de las entradas del puerto de Trieste (noreste), uno de los más importantes del país, ante la obligación de presentar el certificado sanitario anti Covid para poder trabajar.

Los manifestantes, la mayoría estibadores y personal del puerto, pero también muchos representantes antivacunas y opositores de la obligación del pase sanitario, están concentrados desde el pasado viernes, cuando entró en vigor la obligación del pasaporte sanitario en el ingreso 4 del puerto de Trieste, sin bloquear la actividad, pero sí retrasándola.

La concentración se había convertido en un símbolo de la resistencia contra la obligatoriedad del pase sanitario y los manifestantes no cesaban de gritar: "Libertad, libertad", a pesar de que se les había ofrecido incluso la gratuidad de las pruebas anticovid para poder acceder al trabajo.

Durante el desalojo, la Policía ha intentado dialogar con los estibadores, pero finalmente han utilizado sobre todo cañones de agua sobre los manifestantes para obligarles a liberar el paso y también se han producido algunas cargas policiales y lanzamiento de gases lacrimógenos ante la resistencia de los manifestantes. Algunos de ellos han tenido que ser atendidos al sentirse mal por la tensión y otros han sido arrestados.

Los sindicatos mayoritarios CGIL, CISL y UIL emitieron un comunicado en el que pedían "liberar" el puerto pues "las legítimas manifestaciones de disidencia" deben garantizarse, "pero no pueden impedir que un puerto y una ciudad sigan generando ingresos y perspectivas de futuro", explicaron.

"No agraven esta situación porque, respetando todas las ideas, pedimos que la mayoría no sea un rehén de una minoría", añadieron. Finalmente, la Policía logró desalojar la entrada en el puerto pero se vivieron escenas de guerrilla urbana en el aparcamiento exterior entre los agentes y algunos manifestantes que se resistían a abandonar la zona.

Las manifestaciones contra la obligación del pasaporte sanitario han continuado en toda Italia estos días y se vivieron también momentos de tensión en Milán este sábado con cargas policiales contra los manifestantes.