Hasta cinco ministros argentinos, entre ellos el de Interior, Eduardo de Pedro, han puesto este miércoles sus cargos a disposición del presidente de Argentina, Alberto Fernández, tras la debacle electoral de las pasadas elecciones primarias. "Escuchando sus palabras del domingo por la noche" y ante la necesidad de "interpretar el veredicto que ha expresado el pueblo argentino", De Pedro ha considerado que la mejor opción es presentar su renuncia.

Junto con el responsable de Interior, también han puesto a disposición de Fernández su cargo los ministros de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, y el de Justicia, Martín Soria, todos cercanos a la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, informa 'La Nación'. También los responsables de Medio Ambiente, Juan Cabandié, de Cultura, Tristán Bauer, la secretaria de Comercio, Paula Español, y otros funcionarios de la Administración de Fernández cercanos al kirchnerismo.

Las renuncias han provocado una reunión encabezada por Fernández en la Casa Rosada, a la que han acudido el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, así como los ministros de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; de Seguridad, Sabina Frederic; de Producción, Matías Kulfas; de Economía, Martín Guzmán; de Trabajo, Claudio Moroni, y el de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, además del de Exteriores, Felipe Solá, según recoge la agencia Télam. La responsable de la cartera de Salud, Carla Vizzotti, y el de Turismo y Deportes, Matías Lammens, han protagonizado también esta cita, de acuerdo a informaciones de 'La Nación'. El encuentro ha concluido con la vuelta del mandatario a la residencia oficial, la Quinta de Olivos, y sin anuncios respecto a la crisis del Gabinete.

Durante la reunión, tanto Frederic como Moroni han manifestado su apoyo al presidente argentino a través de sendos mensajes. "Todo mi apoyo a Alberto Fernández, síntesis de la unidad popular para lograr el país que queremos. El Frente de Todos es la garantía para que la voluntad del pueblo expresada en 2019 sea una realidad", ha escrito la ministra de Seguridad en Twitter. Igualmente, funcionarios, gobernadores, sindicatos, movimientos sociales y formaciones políticas han expresado su apoyo a Fernández e, incluso, se ha convocado una manifestación de respaldo este jueves en la Plaza de Mayo, en Buenos Aires.

"Un golpe de estado" del kirchnerismo

La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, ha criticado duramente estas renuncias y les ha acusado de "huir de una derrota que es de Cristina Kirchner", en referencia al mal resultado del oficialismo, del que esta formación formó parte en las pasadas presidenciales de 2019. "El intento de vaciar a un presidente por parte de un vicepresidente es algo que los franceses llaman golpe de Estado", ha dicho Carrió a los micrófonos de Radio Mitre. "Esto ya venía mal de origen, porque Cristina Kirchner fue quien eligió al presidente. Un vicepresidente no puede ser el jefe de la oposición", ha apuntado. "Un vicepresidente no le puede indicar a un presidente a quién pone o saca, sea derrotado o victorioso. (...). Le diría al presidente que resista y que evite un golpe de radicalización para evitar un golpe", ha dicho Carrió, quien avanza que la coalición gobernante Juntos por el Cambio lanzara un comunicado al respecto.

Los argentinos acudieron este domingo a las urnas para unas elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (conocidas como PASO) y definir así quiénes serán los candidatos que competirán por los escaños del Congreso en los comicios del 14 de noviembre. Según los resultados preliminares, la coalición opositora Juntos por el Cambio se habría hecho con el 38,3% de los apoyos, mientras que el oficialismo apenas ha convencido al 29,5% del electorado.

Tras el batacazo, el presidente ha prometido redoblar los esfuerzos de cara a los comicios legislativos convocados en noviembre, "con el compromiso y la fuerza de siempre para satisfacer las necesidades que no se han satisfecho".