El presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, ordenó finalmente este domingo que las banderas en la Casa Blanca y los edificios federales del país se bajen a media asta en homenaje al policía que falleció en el violento asalto al Capitolio de una turba de sus seguidores el pasado miércoles.

Desde entonces, Trump había evitado emitir esta proclamación simbólica, que tradicionalmente se hace para recordar a agentes o soldados caídos, lo que había generado numerosas críticas.

Su decisión se anuncia después de que el Congreso colocara este domingo sus banderas a media asta en homenaje a Brian Sicknick, quien falleció a consecuencia de las heridas sufrida cuando se enfrentó a la turba que tomó el Capitolio de EEUU durante unas horas, en una imagen inaudita en el país. La proclamación de Trump explica la medida como "señal de respeto y sacrificio".

Sicknick, de 42 años, tenía más de 12 años de experiencia como oficial de policía del Capitolio. "Muchos detalles acerca de los acontecimientos del miércoles y las causas directas de las heridas de Brian siguen sin aclararse y nuestra familia pide a la gente y la prensa respetar nuestros deseos de no convertir el fallecimiento de Brian en una cuestión política", señaló la familia del policía en un comunicado.

En este sentido, la oficina del fiscal de EEUU en Washington ha abierto una investigación federal por asesinato sobre su muerte.

Este fin de semana Trump ha continuado su silencio, después de que sus cuentas en Twitter y Facebook fueran suspendidas este viernes por existir "riesgo de incitar a la violencia" tras calificar a los asaltantes como "gente muy especial".