El Ayuntamiento de Ibiza quiere aprovechar su remanente para invertir 50 millones en vivienda

El Ayuntamiento de Ibiza reclamará al Gobierno central que le permita destinar todo el remanente de sus arcas municipales, un total de 50 millones de euros, a inversiones en vivienda, según ha anunciado este martes el alcalde, Rafael Triguero.

El alcalde ha presentado un balance de sus dos años de mandato y ha destacado que su equipo ha cumplido o está ejecutando el 82% de su programa electoral y que en los próximos meses desarrollará "una inversión histórica" para acometer 46 proyectos presupuestados en 90 millones de euros.

Entre los principales retos que se ha marcado para su mandato, destaca el plan integral de vivienda, que proyecta la construcción de cerca de medio millar de nuevas viviendas de protección oficial (VPO), junto a las 530 que desarrolla el Gobierno central en Can n'Escandell. Además de este programa, Vila tiene la voluntad de acometer otras promociones con los 50 millones de euros que ha acumulado en los últimos años, debido a las inversiones no llegaron a ejecutarse.

En estos momentos, las administraciones municipales no pueden recurrir libremente a estos remanentes, por lo que Triguero, a través de una propuesta conjunta del Consell de alcaldes de Ibiza, reclamará al Gobierno central que les libere de este bloqueo. "No podemos utilizar estos 50 millones de euros por la falta de una ley general de presupuestos y de una normativa que permita a los ayuntamientos aprovechar estos remanentes de tesorería", ha lamentado el alcalde.

De momento, el Consistorio no tiene un cálculo aproximado de cuántas VPO podría crear con esta inyección económica, pero tiene varias rehabilitaciones de inmuebles, pendientes de financiación, que prevé destinar a jóvenes. Es el caso de un bloque en la UA23 de sa Penya, "donde saldrán entre 5 y 8 habitaciones en formato coliving", que costaría unos 500.000 euros, así como otras dos viviendas en Dalt Vila, que suman 900.000 euros, y una finca municipal ahora okupada junto a la E-10, con un coste estimado de 800.000 euros.

Policía Local

Otro de los grandes objetivos que se marca el Ayuntamiento, y que ya ha solicitado a la Delegación del Gobierno, es ampliar la Policía Local a 155 plazas, las que se "necesitan para responder a toda la actividad que tenemos en la ciudad". En estos momentos, la plantilla está dimensionada en 120 plazas, aunque solo están cubiertas 96 de ellas. "Tenemos prácticamente la misma cifra que hace 25 años", ha indicado el alcalde.

Además de este incremento, el Consistorio prevé llegar próximamente a ocupar hasta de las 115 plazas actuales, gracias a las pruebas que se llevan a cabo actualmente y a lss nuevos puestos de oficiales que se convocan, con cuatro plazas más de subinspector, otra de inspector y un mayor.

Con esta "total reestructuración" de la Policía Local, que entrará en vigor con la entrada de 2026, se quiere dotar al municipio de "un modelo de policía de proximidad, visible y adecuada a las necesidades de la ciudad", destaca Triguero.

Reclamaciones al Estado

El alcalde ha reiterado que seguirán reivindicando los proyectos que tiene pendientes el Gobierno centran en el municipio, como la apertura del Parador Nacional, prevista para este año, la cesión de parcelas del Ministerio de Defensa en es Puig des Molins o el solar anexo a la Comisaría, la consolidación de los acantilados de Dalt Vila y s'Illa Plana, la construcción de una biblioteca pública nacional o la rehabilitación del Museo Arqueológico.