El dueño de uno de los restaurantes quemados de Platja d'en Bossa: "El incendio fue provocado, un acto vandálico"

Las llamas arrasaron la madrugada del martes tres establecimientos y afectaron a un bloque de viviendas

Marta Torres Molina

Marta Torres Molina

Ibiza

"El incendio fue provocado". Así de contundente se muestra la propiedad de uno de los tres establecimientos afectados por el incendio ocurrido la madrugada del martes en Platja d'en Bossa, en primera línea de playa, en la zona correspondiente ya al municipio de Sant Josep. "Nuestro restaurante, Sa Sal, junto con otros dos establecimientos de la zona, fue víctima de un incendio provocado. Las autoridades ya se encuentran investigando los hechos", continúa el propietario en un post que ha colgado en sus redes sociales en varios idiomas.

Ayer mismo, ni los bomberos ni la Guardia Civil se pronunciaron sobre la investigación cuando este diario les llamó para preguntar. El incendio comenzó alrededor de las dos de la madrugada del martes, en una zona especialmente concurrida, ya que se trata de uno de los puntos más populares de la fiesta nocturna de la isla.

El fuego obligó a desalojar a una treintena de familias que en ese momento se encontraban en el bloque de viviendas situado sobre los locales, donde comenzaron las llamas, formado por tres escaleras de veinte apartamentos cada uno. Cinco personas tuvieron que ser atendidas por inhalación de humo, pero todas recibieron el alta casi al instante. También sufrió quemaduras en una mano uno de los bomberos, causadas por el aceite de una de las freidoras de los locales.

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Marie Duchar Clark

El fuego afectó a dos restaurantes que ya habían iniciado la temporada, Sa Sal y S'Espardell (para el que amigos y conocidos han iniciado una campaña de recogida de dinero), y a un bar que estaba a punto de abrir, según informó el alcalde de Sant Josep, Vicent Roig, ese mismo día a primera hora de la mañana, mientras los bomberos habían extinguido ya el incendio y estaban refrescando la zona antes de dar por concluida la actuación.

Ahora, pasados dos días, la propiedad de Sa Sal ha querido explicar cómo está la situación y cómo se sienten. "Queremos expresar nuestra profunda consternación y tristeza por este acto vandálico, que no sólo ha afectado gravemente a nuestras instalaciones, sino también a todo un equipo humano que ha trabajado con dedicación, profesionalidad y cariño para ofrecer lo mejor a nuestros clientes", escriben.

"Sin duda, se trata de un golpe muy duro, pero también de una oportunidad para demostrar la unión, la fuerza y el compromiso que nos definen", continúa el mensaje, en el que dan las gracias por "todos los mensajes de apoyo" que están recibiendo. "Confiamos plenamente en que la Justicia hará su trabajo", afirman antes de concluir: "Pondremos todo nuestro esfuerzo en volver a ser el restaurante que construimos entre todos: nuestro equipo, nuestros clientes y todos los que han creído en Sa Sal desde el primer día".

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