Foro Futuro: Poner «ojos en el mar» desde las aulas

El cuadro ‘El balandrito’, de Joaquín Sorolla, muestra, como muchas de sus obras, el mar cubriendo la mayor parte del lienzo. En ésta, un niño juega inocente con un barquito de vela en un mar movido. Un mar limpio... Un mar muy diferente al que presenta la versión de este mismo cuadro que «contaminó» Lucca, un alumno del Liceo Francés Internacional de Ibiza, para concienciar sobre la contaminación por plásticos, según cuenta en la sexta edición del ‘Foro Futuro’, la versión juvenil del ‘Foro Marino’ de Ibiza y Formentera, ante alumnos de Secundaria de su centro y de los institutos Isidor Macabich y Sa Real.

Lucca detalla en el escenario del centro cultural de Jesús que presentó esta versión a un concurso de la iniciativa ‘Kilómetros de Plástico por Iris’, impulsada por IbizaPreservation y sus fundaciones hermanas en Mallorca y Menorca. Esta «es una llamada a la acción colectiva para inspirar a personas de todas las edades a sumarse a un cambio con pequeños gestos cotidianos», presenta Inma Saranova, directora de IbizaPreservation.

Con este proyecto, que honra a Iris, una joven apasionada del mar que falleció en 2019, se invita a estudiantes de Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional básica y de grado medio a organizar excursiones y recogidas de plástico en la naturaleza y compartir propuestas sobre cómo reducir la contaminación por plásticos a partir de un vídeo, escrito, poema, dibujo u obra de arte.

En éste han participado alumnos como los de Stéphanie Cornejo, profesora de Ciencias en el Liceo, que, junto a Lucca y Melissa, otra alumna que se presentó al concurso, ofrece datos alarmantes sobre la contaminación por plásticos: «Llevamos diez años generando más plásticos que en toda la historia de la humanidad». «En el Mediterráneo se vierten 229 mil toneladas de plástico cada año, lo que equivale a 500 contenedores de transporte al día». «España es el segundo país que más plásticos vierte a este mar», continúa.

Esto, al fin y al cabo, lleva a que el plástico esté presente en todas partes y, como indica Cornejo, «amenaza con contaminar cada rincón del planeta, lo que puede afectar a la salud humana, la salud animal y la salud ambiental». Por ello, destaca que «en un océano, cada gota cuenta», y anima a participar en iniciativas como la presentada.

Mostrar el trabajo realizado

Para ello, Melissa cuenta que fue una de las ganadoras del concurso en 2022 y que, como premio, pasó el día en un barco «con científicos que estudian la contaminación del mar por microplásticos».

Precisamente sobre estos últimos tiene conocimiento el ponente Gerard Bono, que es coordinador de proyectos medioambientales en la organización tarraconense Good Karma Projects, que nació en 2017 de la mano de dos surfistas «hartos» de encontrar residuos cada vez que salían con sus tablas.

La organización cuenta con diferentes proyectos para concienciar a la ciudadanía, como ‘Clean up with good karma’ en el que organizan recogidas de residuos en tramos de 100 metros para después identificarlos a partir de una lista de unos 80 elementos: «Tenemos una estrecha colaboración con el Miterd (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico), que ha desarrollado la herramienta Marnoba», señala Bono. Esta aplicación ayuda a recopilar y enviar información relacionada con las basuras marinas y anualmente envía informes de resultados al Programa Nacional de Seguimiento de las Basuras Marinas en playas del Miterd.

Acciones y resultados

Para asegurar que estas acciones cuentan, Bono resalta que, a raíz de los datos recopilados: «El Ayuntamiento de Barcelona prohibió fumar en sus playas por la gran cantidad de colillas que se encontraban y esto ha llevado a que a día de hoy en las recogidas se agrupen 50 colillas de media, a diferencia de las costas de Tarragona, donde se llegan a encontrar de 1.000 a 3.000 colillas únicamente en un tramo de 100 metros de playa».

De hecho, las playas de Tarragona también destacan por ser uno de los lugares en los que más plásticos se pueden encontrar. «La Playa de la Pineda (Vila-Seca) es la más contaminada de Cataluña, donde el pasado mes de abril la Universidad Rovira i Virgili determinó que por cada kilo de arena hay 2.000 unidades de microplásticos», advierte Bono, que recuerda que las tres siguientes playas más contaminadas de Cataluña también están en Tarragona y en el Delta del Ebro.

Teniendo esto en cuenta, anima a los jóvenes que le escuchan: «Cada acción y decisión de vuestro día afecta de una forma u otra al planeta, pero únicamente dependerá de vosotros si es de forma positiva o negativa».

La siguiente en subir al escenario puede dar fe de ello: «Con tan sólo 22 años ha hecho del mar su profesión», indica Saranova para presentar a Maria Maceiras, que se formó en atención a personas en situación de dependencia y es marinera y divulgadora ambiental. En plataformas como Instagram o Tik Tok, Maceiras difunde vídeos «que ilustran prácticas responsables, como devolver al agua especies en veda o que no alcanzan la talla permitida», señala Saranova.

«Me enamoré del mar con las redes», admite Maceiras, que se introdujo en este mundo porque sus padres y su pareja son marineros. El amor que siente lo refleja al contar tácticas como las que comparte en redes: «Las centollas suelen estar juntas y para cogerlas hay que largar las redes en zigzag», cuenta.

Esta pasión es la que le llevó a recibir un reconocimiento en la categoría Jóvenes Talentos de los Premios Nacionales de Gastronomía y, como relata, por diferentes circunstancias de la vida también le ayudó a conseguir un puesto de mariscadora de pie. De este modo, señala que ahora se dedica a coger «almejas y berberechos», con lo que da fuerza a una frase que le repite su padre habitualmente: «En el mar un día va con otro», para animar a sus oyentes a «no cerrar ninguna puerta en la vida».

En representación local, Joan Costa, fotógrafo submarino de la Asociación Es Blau, es quien «pone ojos que miren al mar» para documentar los problemas que se registran en aguas pitiusas y dar a conocer a los jóvenes problemas como las fugas en emisarios o la desaparición de las nacras. Costa explica a sus oyentes que un mar como el de Ibiza y Formentera «permite tener contacto directo con especies salvajes, por lo que se debe seguir conservando».

Así, él y los demás ponentes fortalecen los objetivos de este foro, con el que, en palabras de Marisol Ferrer, concejala de Cultura, Educación y Juventud del Ayuntamiento de Santa Eulària, informar y sensibilizar a la ciudadanía se convierte en una herramienta clave para el cambio «porque, como bien dice un refrán nuestro: Allò que no es coneix no es pot estimar».

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