La Guardia Civil avisa: quien arroje piedras en Ibiza se arriesga a una multa descomunal

Arrojar grandes rocas en la naturaleza es una actividad tan primitiva como peligrosa para al bolsillo del lanzador, tal y como ha advertido la Guardia Civil.

El instituto armado ha reaccionado en sus redes sociales al vídeo subido por un individuo en los Picos de Europa, en el que arroja una piedra y lo celebra jocosamente posando para su compinche, que graba la proeza.

"Arrojar esta piedra puede suponerle a esta persona una multa de 5.001 a 200.000 euros. El motivo es que en el parque nacional de los Picos de Europa perturbar el entorno es una infracción muy grave. Tenlo en cuenta cuando visites un parque nacional, un entorno especialmente protegido por su valor medioambiental", advierte la Guardia Civil.

Ibiza no es ajena a este tipo de ocurrencias, como demuestra el vídeo que se viralizó la semana pasada, en el un grupo de jóvenes empujaba una roca de grandes dimensiones de un acantilado hasta hacerla caer al mar.

Los hechos ocurrieron en Cap Martinet, en el municipio de Santa Eulària. La publicación iba acompañada de un texto que decía: "Hombres tiran una roca. Hombres felices". Y es que, una vez que la enorme piedra caía al agua, todos empezaban a saltar y gritar eufóricos.