Caen un 3% los empleos en marzo en Ibiza por primera vez en la serie histórica

Marzo acabó con un descenso del 3% del número de afiliados a la Seguridad Social en las Pitiusas, lo que supuso una reducción de 2.003 cotizantes respecto a los 65.954 registrados en 2024. Se puede alegar que, hace un año, la Semana Santa tuvo lugar en marzo (entre los días 24 y 31) y que en 2025 toca en abril, pero es la primera vez de toda la serie histórica (exceptuando 2021, en este caso a causa de la crisis sanitaria originada por el covid) en que se produce un descenso del número de puestos de trabajo en el primer mes de la primavera. Ni siquiera cayó en 2019, a pesar de que, un año antes, las fiestas de la Pasión tuvieron lugar entre el 25 de marzo y el 1 de abril: en aquel 2019 hubo 45.769 afiliados, 319 más que en 2018, apenas un 0,67% más, pero lo suficiente para evitar teñir de rojo esa estadística.

180 vuelos más a Ibiza en Semana Santa

¿Y qué es lo que ha podido suceder? Pues que en 2024 hubo una apuesta muy decidida (y, a la postre, arriesgada), quizás demasiado, por intentar alargar la temporada a marzo aprovechando que en ese mes se celebraba la Semana Santa. No fue bien. Alojamientos y restauración se pasaron de frenada, sobreactuaron, como algunas cadenas confesaron al acabar el ejercicio. Aquel adelanto, que conllevó contrataciones masivas antes de lo habitual, no fue rentable para muchos negocios, que ya en otoño advirtieron de que en 2025 no repetirían la jugada. Potenciar la contratación y acelerar la apertura de poco les sirvió porque el incremento del número de vuelos fue mínimo. No les compensó el esfuerzo.

Estrategias corregidas

Lo único que ha ocurrido este año, pues, es que las empresas turísticas han corregido sus estrategias y las han adaptado a la realidad social y económica. No han seguido apostando por abrir en marzo, antes de tiempo, entre otras cosas por el escaso número de aterrizajes previstos en es Codolar. Lo más probable es que las estadísticas de abril ya compensen esa caída, e incluso es posible que superen los datos de afiliaciones de abril de 2025. Y, seguramente, en marzo de 2026 se iguale el número de cotizantes.

Sin embargo, eso no ha sucedido en Mallorca, donde el número de cotizantes (437.143) incluso ha crecido (+0,73%) respecto a un año antes. La razón es que en esa isla sí se está apostando seriamente por la desestacionalización, respaldada por un notable número de vuelos internacionales que aterrizan en Son Sant Joan, un aeropuerto cuyos pasillos ya eran recorridos por multitud de turistas (la mayoría alemanes) en marzo.

Bajón en la hostelería

Basta repasar las estadísticas de afiliaciones para comprobar que la retracción proviene de la hostelería. Y no es poca. Los alojamientos (hoteles, hostales…) de Ibiza sólo dieron trabajo a 6.420 personas, 1.299 menos que hace un año, lo que supone una bajada del 16,8%. En la restauración, el porcentaje es similar, del 16,95%, con 1.337 camareros y cocineros menos respecto a los 7.887 de 2024. En total, 2.636 empleos menos en la hostelería ibicenca. En Formentera ha sucedido lo mismo, con caídas del 14,25% en alojamientos y del 16,28% en restauración.

El empleo crece en 161.000 ocupados en el marzo más flojo desde 2022

También se observa esa correlación si se echa un vistazo a los resultados por municipios. En el de Ibiza, por ejemplo, hubo 639 cotizantes menos, un número coincidente con los 640 menos que tuvo allí la hostelería. En Sant Antoni, donde se produjo un descenso de 278 trabajadores en general, hubo 331 empleos menos en bares y hoteles. Sant Josep es el único municipio donde se produjo un incremento de afiliaciones, apenas un 0,78%, que contrasta con la caída del 14,27% en la hostelería, donde hubo 339 afiliados menos. El motivo es que estos últimos fueron compensados con el incremento del 17,26% en la construcción (+252 empleos, es decir, casi todos los que hubo en la isla) y otros producidos en el entretenimiento y en la educación. En Sant Joan, los puestos de trabajo en alojamientos y restauración se precipitaron un 46%, con 718 empleos menos, casi los mismos que hay en la estadística general de ese municipio (707).

Y el caso de Santa Eulària es similar al de Sant Antoni: la hostelería se hunde allí un 18,3% (-608 trabajadores) respecto a 2024, si bien sólo hay 338 afiliados menos en total en ese municipio debido a que se equilibró esa fuerte caída en cafeterías y alojamientos con aumentos significativos en la construcción (128 empleos más) y las actividades técnicas y recreativas.

Pico y pala en el ladrillo

Mientras la hostelería no da señales de vida, la construcción en Ibiza sigue pico pala y crece un 3%, con 306 empleos más que los 10.168 que hubo un año atrás. Será por grúas, que sobresalen de la línea del cielo en toda la isla como en pleno boom inmobiliario. En Formentera, el porcentaje de crecimiento es aún mayor, de casi el 12%, con 806 puestos de trabajo en ese sector.

Por el contrario, el comercio al por menor de Ibiza se resintió, con un 3,5% menos de empleos (5.176 en total), como también lo hizo el transporte terrestre (autobuses, taxistas…), con un descenso del 3,2%, resultados similares a los registrados en Formentera.

Los contratos indefinidos a tiempo completo siguen ganando terreno a los fijos discontinuos

En el régimen general (el de los asalariados), bajó un 4.13% el número de afiliados (1.932 menos) en Ibiza. Si bien son unos 40 más que en el total de regímenes, hay que tener en cuenta que hubo una subida del 1,45% de autónomos (200 más) en esa isla.

Como viene sucediendo desde hace más de un año, los contratos indefinidos a tiempo completo (+5,76%, con 1.516 nuevos trabajadores de esa modalidad laboral) siguen ganando terreno a los fijos discontinuos (-22%, con 3.067 empleos menos de este tipo), además de que siguen cayendo los temporales (-16%, casi medio millar menos). Se trata de un trasvase de fijos discontinuos a fijos a tiempo completo que también se produce en Formentera, con descenso del 28% en el primer caso e incremento del 24,5% en el segundo, lo mismo que ocurre en Mallorca.

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