Tragedia de una patera en Ibiza: mueren cuatro migrantes tratando de salvar a otra tripulante

Cinco migrantes somalíes han fallecido cuando intentaban alcanzar las costas de Baleares en una patera procedente de las costas de Argelia. Cuatro de ellos perdieron la vida al intentar asistir a una compañera que había caído al mar, según han relatado los supervivientes en sus declaraciones ante la Policía Nacional en Ibiza, que está investigando lo sucedido.

Los otros 19 consiguieron su objetivo de llegar a España, aunque seis de ellos tuvieron que recibir atención médica con cuadros de deshidratación e hipotermia. Es el trágico balance de una de las numerosas travesías de pateras que siguen la ruta argelina y cuya frecuencia se ha intensificado notablemente durante este mes de febrero.

La patera, con un total de 24 tripulantes de origen somalí, partió el 17 de febrero desde Ain Taya, una población de unos 35.000 habitantes situada en la costa argelina, a escasos 25 kilómetros de la capital, Argel.

Todos los migrantes durmieron juntos en una casa la noche antes de la travesía, tal y como se puede comprobar en un vídeo que se puede visionar en diariodeibiza.es y en el que se saludan y se desean suerte, unos con rostros tensos y otros más sonrientes. Al día siguiente se hicieron a la mar en una embarcación de seis metros de eslora y pintada de color verde.

Abandonados en el mar

En algún momento de la travesía, una mujer llamada Hafsa cayó al mar. Cuatro compañeros de viaje decidieron lanzarse para intentar salvarla, pero ya no pudieron volver a subirse a la patera y los cinco quedaron abandonados en algún punto indeterminado del mar Mediterráneo.

Fue la más trágica, pero no la única desventura que sufrió la expedición. Ya fuera por avería o porque no quedaba más gasolina, el motor dejó de funcionar. El viaje en patera entre Argelia y las Pitiusas dura en torno a un día, pero esta vez pasaron cinco días desde que la barca salió de la costa africana hasta que fue interceptada por las autoridades españolas.

El pasado sábado por la mañana, el ‘Hypatia de Alejandría’, un ferri de Baleària, dio la voz de alerta a 37 kilómetros al noreste de Ibiza. A la llamada acudió Salvamento Marítimo, que a las 15.10 horas dio por finiquitado el rescate de los 19 migrantes.

Todos ellos fueron trasladados al puerto de Ibiza, donde quedaron bajo custodia de la Policía Nacional, que como suele ocurrir en estos casos ha tomado declaraciones para intentar esclarecer quién era el patrón, o patrones, de la patera para proceder a su detención. El plazo de 72 horas expira este martes.

El sueño truncado de Abdiqani

Una de las cuatro víctimas que se lanzó al agua fue Abdiqani, un adolescente de apenas 14 años. Su hermana mayor, Sacdiyo, de 16 años, cuenta a Diario de Ibiza que su hermano era «un chico joven que había terminado la escuela y no tenía trabajo». «Mi padre nos abandonó cuando éramos pequeños. Mi madre nos cuidó y pagó nuestra educación», explica vía mensaje de móvil desde la localidad de Garowe, capital de la región de Puntlandia (Somalia).

A pesar de su juventud, Abdiqani tenía claro que «Somalia no funciona» y que en este país del cuerno de África, una de las zonas más pobres de todo el planeta, «todo son problemas». «Quería una vida diferente», resume Sacdiyo.

Por esta razón, Abdiqani se puso a trabajar hasta que ganó dinero suficiente para comprarse un coche. Según el relato de su hermana, con este vehículo salió de Somalia y, de alguna manera, se las apañó para llegar hasta Argelia, donde siguió a pie su camino por el desierto. Una auténtica odisea que duró cinco meses hasta que por fin llegó a Ain Taya junto con otros compatriotas, algunos de su mismo barrio.

La noche del 16 de febrero, justo antes de subirse a la patera, Abdiqani llamó a Sacdiyo y al resto de su familia para confirmarles que al día siguiente intentaría llegar a algún punto de España. El año pasado, al menos 517 personas perdieron la vida en la ruta argelina, según Caminando Fronteras, pero la cifra real puede ser mucho mayor.