Estos son los famosos que han pasado por Tagomago

En el islote hay tres edificaciones: una villa privada, un club y un faro

Ibiza 03 FEB 2025 12:10 Actualizada 03 FEB 2025 12:18

El lujo del islote de Tagomago se sitúa en el punto de mira de muchos famosos que buscan un lugar exclusivo para sus vacaciones. Por la isla han pasado jugadores como Cristiano Ronaldo o Bale. El jugador galés incluso le pidió matrimonio en la isla a su por entonces novia, Emma Rhys-Jones.

La actriz, modelo y diseñadora de moda británica Liz Hurley celebró su cumpleaños a mediados de 2018 en la isla de Tagomago. Allí, coincidió con el marido de Norma Duval, Matthias Khün, y ese verano, Hurley aterrizó en Mallorca, donde presentó su colección de bañadores en un local de puerto Portals de la inmobiliaria Kühn&Partner, de la mano del empresario alemán.

Si retrocedemos a la década de los setenta, grupos como Rolling Stones, Police o hasta el gran Bob Marley, también pusieron sus pies en Tagomago. Además, fue en esta isla en la que se rodó el videoclip de uno de los hits musicales de finales de los 80, La Lambada.

También en 2022, Kühn se volcó en promocionarTagomano y realizar gestiones, pese a no ser oficialmente el titular. El promotor consultó a un asesor y le informó de que un influencer con más de cuatro millones de seguidores quería rodar un vídeo en la isla que luego colgaría en Youtube.

El islote también fue escenario de grabación de Netflix en 2023, cuando Kühn se interesó en agilizar todos los permisos para no perder un alquiler de 13 semanas de la plataforma.

El cantante Justin Bieber ha sido otro de los inquilinos célebres de la mansión que hay en el islote. Además, Tagomago ha acogido acontecimientos exclusivos como el primer aniversario del nieto de Carmen Cervera, la baronesa Thyssen.

Matthias Khün y Norma Duval también han protagonizado muchos reportajes para revistas del corazón en este enclave de ensueño, donde se conocieron.

En la isla hay tres edificaciones: una villa privada, un club y un faro.

La casa que hay en el islote recibe el nombre de Can Domingo y es del característico color blanco ibicenco. Cuenta con cinco habitaciones dobles, cada una con baño, spa y vistas al mar. En el interior cuenta con zona de estar con comedor y cocina. En el exterior hay una piscina, jacuzzi y una casa para el servicio.