Sanidad en Ibiza: «Hacen falta más camas en las Urgencias del Hospital»

«Construyeron este hospital nuevo y encima ahora hacen falta más camas», se queja Juan Antonio Bosch tras salir del servicio de Urgencias del Hospital Can Misses, de plena actualidad por las críticas vertidas el día anterior por el Sindicato Profesional de Técnicos Sanitarios (USAE).

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Bosch puede corroborar que tanto los sanitarios como los usuarios se ven afectados por la saturación que sufre esta unidad en plena temporada de gripe y de virus respiratorios, sobre todo debido a la falta de habitaciones a las que trasladar a los pacientes que requieren de un ingreso hospitalario. Es el caso de la propia mujer de Bosch, que acudió a Urgencias el día 21 por la tarde y el jueves al mediodía, aún sigue en la camilla de un box.

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«Nos dicen que aún no la pueden ingresar en planta porque faltan camas. Al menos estará mejor allí que fuera del hospital», se resigna Bosch. Eso sí, quiere dejar claro que la atención que está recibiendo su esposa por parte del personal de Urgencias es irreprochable en todos los sentidos. «Los profesionales la están tratando estupendamente», subraya.

Como cada invierno, el Sistema Nacional Sanitario hace frente a un repunte de la presión asistencial debido a la temporada de gripe y del resto de infecciones respiratorias, que este año están atacando con especial virulencia. Es un fenómeno recurrente.

Por ello, el sindicato USAE alzó la voz de alarma porque, a su juicio, en el Hospital Can Misses no se han tomado las medidas suficientes para contrarrestar una previsible sobrecarga laboral y garantizar espacios para atender adecuadamente a los pacientes.

Este miércoles se llegó a un punto crítico que acabó con la paciencia de varios profesionales, que acudieron al USAE para reclamar ayuda. «Se dio una situación muy grave. Estaban todos saturados, después de guardias de 12 horas y tantos días de sobrecarga», confirma la secretaria autonómica de este sindicato, Rosa Planells.

«No nos hacen caso»

El sindicato había detallado en su comunicado el «pico crítico» que se dio esa mañana en Urgencias. Coincidieron un total de 61 pacientes, 10 de ellos pendientes de ingresar en planta hospitalaria por falta de camas, 19 que esperaban atención médica y otros 27 en observación.

«Fui a hablar con la dirección de Enfermería pero me indicaron que está en marcha el plan de contingencia [para reducir las demoras en Urgencias] y que, en principio, no se podía hacer nada más», recuerda Planells.

«Yo sí que creo que se puede hacer algo más cuando tienes tantos enfermos en Urgencias y hasta seis camillas en el pasillo para la gente que no puedes ingresar», subraya la representante sindical. Aunque lamenta que «no es que haya una plantilla muy alta» en el servicio, sus reivindicaciones se centran en habilitar las camas suficientes para los pacientes que necesitan ingreso hospitalario.

Así, no entienden que no se abran las plantas hospitalarias que hay disponibles en la actualidad. «Siempre puede haber otro recurso para mejorar esta saturación, sobre todo por el bien de los ciudadanos, pero también por la salud de los trabajadores», recalca Planells.

«En la dirección saben perfectamente que cada mes de enero se repite esta saturación. Pueden abrir otra planta y estamos hartos de repetirlo», sentencia. En la mañana de ayer jueves, la sobrecarga crítica que se dio el día anterior se había reducido notablemente. No obstante, «aún quedan 10 pacientes pendientes de ingreso, uno de ellos desde el lunes», puntualiza la secretaria autonómica del sindicato USAE.

Refuerzos en primaria

Para el delegado del Sindicato Médico de Balears (Simebal) en Ibiza y Formentera, Carlos Rodríguez, el aumento de la presión en Urgencias no se debe una falta de facultativos. En plena temporada de virus respiratorios, «se necesitan más camas, pero hay la sensación de que el número de médicos en el servicio es aceptable por primera vez en muchos años», subraya.

Respecto a las soluciones para ganar fluidez y reducir esta sobrecarga, sus propuestas no se limitan al servicio de Urgencias y también pasan por un buen uso de los recursos sanitarios por parte de los pacientes. «Ahora se va a Urgencias como si fuera el cajero automático. No lo critico, porque los centros de salud a veces están colapsados y, si llamas, igual te dan cita para al cabo de cinco días. Por eso, empezar por la Atención Primaria es básico para mejorar todo el sistema», indica.

Una de las principales reivindicaciones de Simebal concuerda plenamente con este principio. Se trata de que haya centros de salud de Ibiza que ofrezcan la asistencia de urgencias las 24 horas del día durante toda la semana, al igual que sucede en Mallorca y Menorca. «Tenemos un agravio comparativo con ellos y eso que los menorquines son la mitad de población», lamenta.

En estos momentos, las dos islas vecinas cuentan con centros de salud con Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) que prestan atención, de manera ininterrumpida, durante todo el año. En cambio, los tres ambulatorios de Ibiza (en la avenida 8 d’Agost de Vila, en Santa Eulària y en Sant Antonio) solo están disponibles desde las cinco y media de la tarde hasta las ocho de la mañana de lunes a viernes, precisa Rodríguez, mientras que durante los fines de semana sí que atienden las 24 horas del día.

«Disponer de estos SUAP las 24 horas del día reduciría muchas visitas a las urgencias hospitalarias», incide este profesional. Además, también aliviaría la carga asistencial de los médicos de Primaria que, entre semana, se ven obligados a restar tiempo de su consulta para atender a los casos de atención urgente si llegan a los centros de salud.

Mascarilla y vacunación

Hay otra razón de peso que explica que la temporada de infecciones respiratorias se note cada vez más. Por una parte, este año no se trata solo de la gripe, sino que «hay cinco virus circulando [el de la gripe, el covid-19, el virus respiratorio sincitial, el rinovirus y el norovirus]. Por otro lado, «la población cada vez está más envejecida en nuestro país».

«Son los mayores los que suelen tener patologías asociadas, como las cardíacas o pulmonares, que se complican con estos virus», detalla. Por ello, aconseja insistentemente acudir a las campañas de vacunaciones y el uso de las mascarillas en espacios cerrados, «sobre todo si se tiene cierta edad y patologías». Al menos, hasta que pase el mes de febrero.

«Ahora los virus circulan al máximo y, como hace frío, la gente se refugia en cafeterías o sitios cerrados. Con un estornudo o con la tos, ya se están expandiendo estos virus», avisa Rodríguez.

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