Juicio a dos ibicencos de una red de narcos que operaba en Eivissa, Mallorca y Miami

La banda transportaba drogas de diseño desde Balears a Estados Unidos

Imagen del juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Palma.

Imagen del juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Palma. / M.O.I.

Marcos Ollés / David Ventura

Tres acusados han reconocido hoy, durante el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial, que participaron en una red para exportar grandes partidas de éxtasis y ketamina desde Mallorca e Ibiza hasta Miami (Estados Unidos). Estos sospechosos han confesado ante el tribunal tras pactar con la Fiscalía y aceptar penas de dos, cuatro y seis años y medio de cárcel respectivamente. Otros cinco encausados se han desvinculado del narcotráfico y han proclamado su inocencia. El presunto cabecilla de la banda, un reconocido DJ, y otros dos sospechosos están huidos y declarados en rebeldía. Al inicio de la vista oral, varios abogados defensores han reclamado la nulidad del proceso judicial alegando vulneraciones de derechos fundamentales. El tribunal resolverá estas cuestiones en la sentencia.

Entre los once miembros de la banda que están siendo juzgados hay dos ibicencos: V.T.R. y C.M.C. Al primero de ellos se le acusa de actuar como correo o ‘mula’, transportando grandes cantidades de estupefacientes por cuenta de la red a través de viajes a Miami en los que ocultaba las sustancias en su equipaje, así como labores de distribuidor de drogas a pequeña escala en la isla de Eivissa.

Por su parte, a C.M.C. la investigación la considera responsable de actuar como conseguidora de personas dispuestas a asumir el riesgo de viajar a los Estados Unidos transportando la droga, además de gestionar la obtención de los billetes de avión y los visados para la entrada en los Estados Unidos y de encargarse de la distribución a pequeña escala de los estupefacientes en Eivissa.

El juicio es fruto de una investigación de la Guardia Civil, bautizada como Operación Pertinax, que culminó en agosto de 2020 con la detención de 21 personas en Ibiza, Barcelona y Girona. Los agentes se incautaron de ocho kilos de drogas de síntesis, como ketamina y éxtasis, 38 kilos de marihuana y 4.500 plantas de cannabis. Las pesquisas se iniciaron en octubre de 2019 tras detectarse la presencia de un grupo de personas afincadas en Mallorca e Ibiza que se estaba dedicando a introducir en Balears grandes partidas de drogas que luego transportaban a Miami en equipajes con dobles fondos que llevaban personas contratadas para ese fin.

Según el escrito de la acusación, el ibicenco V.T.P. viajó en dos ocasiones a Miami en diciembre de 2019 transportando «cantidades indeterminadas de sustancias estupefacientes», mientras que C.M.C. se encargaba de la documentación.

V.T.P. fue detenido el 30 de enero de 2020 en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, cuando iba a tomar un vuelo con destino Madrid, donde realizaría el transbordo con destino Miami. En la maleta llevaba un total de 16,2 kilogrados en pastillas de MDMA.

Posteriormente, el 26 de mayo de 2020, se practicó la diligencia de entrada y registro del domicilio en el que vivían V.T.P. y C.M.C., donde encontraron, entre otras cosas, diez teléfonos móvlies, dos básculas de precisión y material informático y documentación relativa a la organización.

En el operativo participaron agentes de la Agencia HSI (Homeland Security Investigations) de Estados Unidos, lo que permitió la detención de tres personas en Miami, donde se incautaron 15 kilos de MDMA en píldoras y 14 kilos de ketamina líquida.

Un DJ, al frente de la trama

Las pesquisas de la Guardia Civil situaron al DJ Hugo Bianco como líder de la trama. El artista supuestamente aprovechaba los contactos que tenía en Ibiza y Miami, donde actuaba con frecuencia, para establecer una red de contactos que le permitieran traficar con drogas entre Balears y Estados Unidos. Este discjockey pinchó asiduamente en locales de Eivissa y, en los años 2019 y 2020, llegó a compartir cartel con el afamado dj Marco Carola en la fiesta MusicOn.

Bianco -para quien la Fiscalía pide nueve años de prisión- reside actualmente en Miami y está declarado en rebeldía, junto a otros dos encausados, al no atender los requerimientos judiciales para comparecer por este caso de narcotráfico.

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