Sant Josep investiga el peligroso torneo de saltos ilegal en la zona de la Torre d’en Rovira

El Ayuntamiento de Sant Josep investiga una convocatoria de saltos que se realizó en la zona de la Torre d’en Rovira, cerca de Cala Bassa, por no contar con la autorización correspondiente.

Desde el Consistorio apuntaron que los promotores de la quedada solicitaron al Ayuntamiento una autorización para poder grabar la cita, que consiste en saltar desde los acantilados al agua, haciendo piruetas en el aire.

El Consistorio denegó el permiso para grabar ya que no contaban con autorización para llevar a cabo la actividad ,por lo que han «han infringido la normativa conscientemente», recalcan.

Ahora, los organizadores se enfrentan a sanciones que pueden ir de los 30.001 a los 300.000 euros y desde el Ayuntamiento apuntan que hay «suficientes elementos» para identificar a los organizadores de este evento.

Se trata, según recuerdan desde el Consistorio, de la misma multa que se enfrenta el dj Diplo, al organizar una actividad ilegal. En este caso, el estadounidense Diplo convocó una fiesta ilegal a través de sus redes sociales en el mirador de es Vedrà, el pasado 24 de junio. En este caso, el dj también publicó en sus redes sociales un vídeo del evento, del que no desveló la ubicación hasta momentos previos a la convocatoria. Los agentes de la Policía Local levantaron acta por la actividad ilegal y debe ser el departamento de actividades del Ayuntamiento el que debe valorar el importe concreto de la sanción.

Dos días de saltos

La quedada de saltos, que al parecer es una competición internacional, celebró una primera concentración en la mañana del sábado 3 de agosto en los acantilados de Cap Martinet, en el municipio de Santa Eulària. En ese caso, la cita logró reunir a varios centenares de jóvenes que indicaron que se trataba de un «entreno» y alegaron que al día siguiente se celebraría lo que consideraban una final de saltos.

En la segunda quedada, según se constata en los vídeos publicados en redes sociales, el número de espectadores también es numeroso y se añaden, con el correspondiente peligro que conlleva, otras decenas de personas que siguen la competición desde el agua -ya sea sobre un paddel surf, unas colchonetas o, incluso, nadando-, así como una gran cantidad de embarcaciones que no dudan en aproximarse a la costa para no perder detalle de la cita ilegal.

Quedada internacional de saltos en Cap Martinet

Estas quedadas se incluyen en el circuito Freelife y el punto de encuentro es secreto hasta poco antes de la convocatoria. La cita que tuvo lugar en las proximidades de Cala Bassa ha sido publicada en los perfiles de redes sociales de Freelife Culture y Extreme Official, donde aparecen vídeos de saltos extremos desde grandes alturas y diferentes escenarios de todo el mundo.

Lanzando piedras

Por otro lado, el Ayuntamiento de Sant Josep también está investigando otro vídeo publicado en redes sociales -en el perfil denominado piedras.tirar- donde aparecen varios jóvenes lanzando al agua una roca de grandes dimensiones. La ubicación es la misma desde donde se graban las escenas de los saltos, la zona de la Torre d’en Rovira, y, de hecho, no se descarta que ambos actos estén relacionados.

En este caso, aparecen hasta cinco chicos, que son los encargados de lanzar la roca al mar, rodeados de decenas de hombres jóvenes que graban la escena a la vez con sus móviles, mientras animan con gritos a los otros para que tiren la piedra acantilado abajo.

Al contrario que en la quedada de saltos, en este vídeo no aparecen ni bañistas ni embarcaciones próximas a la costa y al lugar donde lanzar la piedra.

Desde el Ayuntamiento apuntaron que en ambos casos son actividades que suponen un «riesgo para la integridad de sus participantes, además de afectar al entorno donde se practican», y reiteraron que no cuentan con la autorización, en el primer caso, pertinente.