Llama la atención

Que el Consell de Ibiza esté estudiando la posibilidad de incorporar detectives en la lucha contra los taxis pirata. Esta opción se utiliza desde hace años para detectar y sancionar fiestas ilegales en casas privadas, que proliferaron como consecuencia del aislamiento a que obligó la pandemia del covid. Los detectives han funcionado bien ya que contrataban taxis ilegales y les dirigían a una ubicación en la que les esperaban agentes de la Policía Local para poder interceptar a los conductores. Además, el Consell anuncia más contrataciones para evitar un bloqueo en la tramitación de expedientes por intrusismo, cuyo número crece cada año por el aumento de la actividad de control y vigilancia.

El absoluto descaro con el que, según explicaron desde la Policía de Sant Josep, los organizadores de las fiestas ilegales en la vivienda denominada La Jacarandá explicaron a los agentes que el evento duraría «entre dos y tres días y que no tenían pensado apagar la música». «Nos lo dicen así, ni cortos ni perezosos», explica José Antonio Granados, jefe de este cuerpo policial josepí. Esta casa acoge fiestas after hours desde hace ya tiempo.