Un año a la espera de recibir agua corriente en es Figueral

Tras largo tiempo a la espera de que el suministro de agua corriente llegara a sus casas, los vecinos de es Figueral daban por sentado que, en el verano de 2023, dejarían de depender de los camiones cisterna. Un año después, todo sigue igual. A parte de las molestias que implica depender del suministro a domicilio, más aún en temporada alta, el coste del coste se encarece notablemente.

El metro cúbico del agua transportada a cisternas particulares cuesta una media de ocho euros, pero se reduce a dos euros si se recibe a través de la red municipal de Santa Eulària. El agravio que denuncian los vecinos de es Figueral se basa en que ellos viven en una zona calificada como urbana en el planeamiento municipal, por lo que deberían disponer de los servicios básicos, como suministro de agua o saneamiento. «No tenemos ninguno de los dos todavía ni tampoco aceras», lamentan. Tan solo cuentan con la electricidad.

En junio de 2023 finalizaron los trabajo para canalizar el agua hasta los domicilios

Pese a que en junio del año pasado finalizaron las obras de las conducciones para la distribución de agua en este núcleo, todavía no se ha podido estrenar. Para su puesta en marcha , falta que el Ayuntamiento pueda recepcionar las obras del depósito para almacenar el caudal de la desaladora de Santa Eulària, pero el farragoso procedimiento burocrático ha retrasado este último paso.

Un portavoz municipal explicó ayer que el Consistorio está pendiente de la autorización del Govern balear, que certificará que se cumplen con todas las medidas sanitarias. Esta autorización ha llegado hace dos meses, según Santa Eulària, por lo que ahora prevén que, a lo largo de junio, puedan empezar los últimos trabajos para conectar el depósito con la red de distribución a las viviendas.

Sin fecha concreta

No obstante, aún faltan por llegar algunos de los elementos necesarias para completar la instalación, matizó el Ayuntamiento, sin especificar los detalles de estas piezas. En cualquier caso, las trabajos pendientes «se pueden ejecutar en dos o tres semanas, si no sucede nada extraordinario», anunció Santa Eulària.

A los vecinos de es Figueral la inminente llegada del verano, sin noticias de la puesta en marcha de la red de agua corriente, les genera inquietud, más aún cuando el núcleo turístico ya está a pleno rendimiento. «Esta zona está dejada de la mano de Dios. Ni tenemos agua ni sabemos cuándo la podremos tener», lamenta Alfonso Pérez, el vicepresidente de la Asociación de Vecinos es Figueral. Le acompaña el presidente, Enric Matalí, y cuatro socios: Julio Perosanz, Javier Ruiz, Gisela Trawnik y Pepe Juan. Este último es el propietario del restaurante y hostal Es Alocs, la sede oficiosa de la asociación y el establecimiento más antiguo de es Figueral, ya que lleva en funcionamiento desde 1964.

Es Alocs es un ejemplo de los inconvenientes que supone esta falta de suministro. El hostal cuenta con 49 plazas y, en plena temporada, necesita un camión cisterna diario. Cada uno de ellos cuesta más de cien de euros, detalla Juan. En la zona se encuentran otros dos establecimientos similares, Las Golondrinas y Apartamentos Ferrer, y dos grandes hoteles del grupo Invisa, el Club Cala Blanca y el Club Cala Verde, que copan la gran mayoría de las plazas turísticas.

Los domicilios afectados

Según los datos aportados por la asociación de vecinos, la parte residencial consta de 121 casas, todas ellas viviendas unifamiliares salvo los 27 apartamentos llamados Es Melvins. La falta de agua corriente en todos estos domicilios fue una de las principales reivindicaciones que impulsó la creación de la asociación de vecinos, pero no la única.

Los trámites para constituir la entidad empezaron en abril de 2019, pero no concluyeron oficialmente hasta julio del año siguiente. Poco antes de las elecciones municipales de mayo de 2019, los vecinos de es Figueral recibieron la visita en campaña de Carmen Ferrer, que después se convertiría en la alcaldesa.

«Era la primera vez que veíamos un político por esta zona», apuntan. Pérez recuerda que, en ese encuentro, detallaron a la candidata todas las carencias en infraestructuras a las que tenían derecho como núcleo urbano. «Se comprometió a llevarnos un proyecto de suministro de agua y otro de saneamiento, después del verano, si resultaba elegida. Lo cumplió en una reunión que celebramos ese octubre».

"Somos la zona olvidada del municipio de Santa Eulària", lamenta la asociación de vecinos

Santa Eulària inició la tramitación de la red de distribución de agua, ya que se consideraba prioritaria. Esta actuación se adjudicó en enero de 2022 a Contratas Vilor, con un presupuesto de 568.167 euros y un plazo de ejecución de siete meses. Por su parte, la red de saneamiento «se pospuso para la siguiente legislatura», apuntan los vecinos.

El Ayuntamiento indicó ayer que se han empezado a estudiar las necesidades técnicas que necesitaría la instalación de alcantarillado en es Figueral. «No es un proyecto sencillo, ya que supone bombear las aguas negras desde es Figueral hasta Sant Carles, con lo que se debe superar una larga distancia y un desnivel importante», precisó el portavoz municipal. Así, los vecinos siguen recurriendo a las fosas sépticas. «Somos la zona olvidada del municipio», sentencian.

Suscríbete para seguir leyendo