Turismo en Ibiza: «Aún faltan dos semanas hasta que empiece todo»

Hosteleros y comerciantes de Santa Eulària confirman que la temporada aún no ha empezado a pesar de que marzo trajera un buen arranque

La Semana Santa ha sido más «tranquila» de lo esperado

Estela Torres Kurylo

Estela Torres Kurylo

La mayoría de hosteleros y comerciantes de Santa Eulària coinciden en que la temporada turística todavía no ha empezado. Unas vacaciones de Semana Santa que han llegado muy pronto han traído días de actividad, pero no la que se esperaba. Ahora, se prevé un bajón antes del inicio de una temporada cuya calidad se verá determinada por el poder adquisitivo de los visitantes y la oferta económica de los alojamientos.

«Está tranquilo», comentaba ayer Giada, camarera desde hace seis años en una cafetería del paseo marítimo de Santa Eulària. Con la llegada de la Semana Santa ha visto un cambio en la última semana: «Teníamos gente de toda la vida y ahora hay caras nuevas», afirma. El año pasado en estas fechas tenían algo más de clientela y considera que los precios son el principal motivo por el que puede haber una diferencia. Cree que aún queda para el inicio de la temporada turística: «Aunque venga gente ahora, tenemos que esperar a finales de abril». Para cuando todo empiece augura que hay que «tener en cuenta la subida de los precios y comprobar si la gente podrá aportar esa cantidad de dinero para disfrutar unas vacaciones».

Algo parecido comenta Juanito Cosmi, de Can Cosmi, sobre cómo será esta temporada, a la que da por empezada «pero muy poco a poco». Comenta que el cómo será dependerá «de la gente y el dinero que tengan». Tanto él como Giada aportan la visión de que el turismo es diferente en Santa Eulària, en comparación con otros lugares de la isla: «En Ibiza o Platja d’en Bossa la gente es tal vez más joven y en Santa Eulària es más familiar». Apunta Cosmi señalando: «En abril quienes vienen son de más poder adquisitivo», en comparación con el turista de pleno verano. Para ellos, esta Semana Santa es más floja que el año pasado: «Ha llegado muy pronto y los hoteles y las previsiones de mal tiempo no han acompañado», añadía.

En el caso de Catia, camarera del restaurante Atenea Ibiza, también en el paseo, no sabe si achacar al tiempo o a la subida de precios el que ahora el establecimiento esté «súper tranquilo». En comparación con el año pasado, que estarían «llenos», apunta. Coincide en que la oferta económica será determinante ante las previsiones de la temporada estival: «Dependerá de los alquileres y de cómo van a estar, porque los costes están muy elevados en todos los sentidos». Igual que Giada, considera que todo empezará «para finales de abril» y espera: «trabajar y que vengan turistas».

En el Capricho, su encargada María Ángeles, también es testigo de una Semana Santa «más floja» que la del año pasado: «Teníamos mayores expectativas, esperábamos más gente», afirma. Con esto, considera que todavía no se puede decir que la temporada haya empezado: «Ahora va a haber un parón importante porque ha venido muy pronto». Espera que esta temporada «sea igual o mejor que la del año pasado», que considera que «fue muy bien». Por el momento, en estas fechas han tenido una clientela conformada por más gente nacional. Por el contrario, responde que los clientes de verano «están más estresados. Están de vacaciones pero tienen mucha prisa para ir a los sitios».

Del mismo modo que Santa Eulària tiene un turismo diferente al de otros pueblos de la isla, de la hostelería a los comercios, esta época del año deja un sabor de boca diferente. En aquellos establecimientos en los que se cuenta con los habituales souvenirs que uno busca como pequeño recuerdo de un viaje, la impresión no es mala.

Beltrana es dueña de la tienda 4 pasos desde hace cuatro años y junto a su empleada Lila apunta que además de haber tenido bastante gente en estas vacaciones, ha habido «un poco más que el año pasado». Esta buena experiencia influye en que dé por empezada la temporada. En comparación con el verano, considera que «ahora los clientes gastan un poco más. En verano hay mucha gente, pero gastan menos». Esto no quita que espere que esta temporada vaya bien, igual que le fueron las dos anteriores. En estos momentos, sus clientes se llevan un poco de todo: «imanes, llaveros, cosas en las que está escrito Ibiza...».

En la misma línea, Ainhoa, encargada del centro comercial Art (la Sirena) en Santa Eulària, considera que ha arrancado bien: «Llevamos toda la semana pasada bastante bien, con movimiento». Sin embargo, al haber llegado tan pronto, como otros, piensa que «a lo mejor de aquí a dos semanas hay un poco de parón hasta que ya empiece todo». Espera que esta temporada sea igual de buena que el año pasado. En Semana Santa nota que ha habido un «boom» de españoles que han venido por vacaciones: «en verano hay españoles pero hay mucha más variedad de turismo», señala.

También comentando la temprana llegada de la Semana Santa, María José pasa su primer año en la tienda Miel&Pomelo, de moda, hogar y complementos. Comenta que «está la cosa bastante tranquila», con incertidumbre de que los culpables sean o el tiempo o la Pascua, que «ha caído muy pronto y no están todos los hoteles abiertos». Coincidiendo con Ainhoa, empezó marzo «mucho mejor».

Del mismo modo, Alba, dependienta en la tienda A ver, apunta que la Semana Santa «No es lo mismo cuando viene a mediados o finales de abril que a finales de marzo. A parte que la previsión meteorológica ha sido un poquito mala y creo que incluso habrá gente que haya anulado sus viajes». Este año «no tiene nada que ver» en comparación con el año anterior. Cree que también hay que esperar a dar por comenzada la temporada y coincide con los demás testimonios: «tampoco he valorado cómo van a estar los precios de los hoteles este año y creo que eso influye muchísimo».

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