La nueva conselleria balear del Mar y del Ciclo del Agua advierte desde hace semanas de la falta de personal para ejercer las nuevas competencias de Costas, que la Comunitat Autònoma asumió el pasado 1 de julio. Un portavoz del Ejecutivo autónomo explica que, según los técnicos, «la situación es absolutamente insostenible». En el caso de las Pitiusas, por ejemplo, no se ha traspasado ningún vigilante.
Los tres vigilantes de Ibiza y uno de Formentera que ejercían, antes del traspaso, toda la actividad de control de la Demarcación de Costas, del Ministerio de Transición Ecológica, siguen dependiendo del Estado aunque se han reducido sus funciones. Desde julio, el Govern balear ha asumido las competencias de gestión y concesión de las autorizaciones temporales de las playas y mar, también de la ocupación del dominio marítimo-terrestre de instalaciones desmontables o bienes inmuebles (chiringuitos de playa, por ejemplo) y de las zonas de servidumbre de tránsito y acceso al mar, además de la gestión de las concesiones demaniales y la tramitación de los correspondientes expedientes sancionadores, entre otras cosas.
Así, para controlar, por ejemplo, la ocupación de las concesiones de playa, ni Ibiza ni Formentera cuentan actualmente con ningún vigilante, según la información facilitada por el Govern. Se mantiene, eso sí, el celador de Costas con el que ya contaba el Govern (para gestionar la zona de servidumbre de protección) antes del traspaso de las nuevas competencias.
Celador de Ibiza
Antes del traspaso del 1 de julio, el servicio de Costas y Litoral de la Comunitat Autònoma contaba con una plantilla de ocho personas, entre ellas el celador de Ibiza. El acuerdo del Govern con el Estado para aumentar las competencias de Costas implicaba el traspaso de 18 puestos de trabajo: siete de funcionarios, de los cuales cuatro están vacantes, y 11 de personal laboral, con cuatro vacantes también.
La conselleria balear del Mar se queja de que, aparte de que las Pitiusas no cuentan con vigilante alguno, tampoco se ha traspasado personal con titulación cualificada (ni superior ni de grado medio), ni de tipo técnico ni jurídico, para hacer frente a la gran carga de trabajo asumido (cerca de dos mil expedientes abiertos están pendientes de resolver).
Más servicios, menos personal
Además, el anterior Ejecutivo autónomo aprobó en mayo una ampliación de plantilla, con 12 nuevos puestos de trabajo, para la gestión de las nuevas competencias de Costas, pero a día de hoy todavía siguen sin cubrirse. De esta manera, salvo los nueve vigilantes de la costa (ninguno en Ibiza y Formentera) y un delineante, el servicio de Costas y Litoral de la Comunitat Autònoma cuenta con las mismas ocho personas en plantilla que antes del 1 de julio para seguir gestionando los mismos servicios que ya prestaba más los que se han añadido.
El Govern recuerda que Andalucía, que cuenta con 910 kilómetros de costa, recibió del Estado 62 empleados para su gestión; y Cataluña, con 699 kilómetros de litoral, 34 trabajadores. Balears, en cambio, cuenta con 1.428 kilómetros de costa y, con el traspaso de la competencia ha recibido 18 puestos (11 empleados si se tienen en cuanta las siete vacantes). «El agravio comparativo es ostensible», subrayan.
