La Audiencia absuelve a Josep Ramon Balanzat de los delitos de abuso y acoso sexual a dos menores

El tribunal considera que no hay pruebas suficientes de que el expolítico y profesor «manoseara, besara y hostigara» a los denunciantes

Josep Ramon Balanzat, antes de una de las sesiones del juicio. | B.RAMON

Josep Ramon Balanzat, antes de una de las sesiones del juicio. | B.RAMON / M.O./redacción. palma/eivissa

M.O./Redacción.

La Audiencia Provincial de Palma ha absuelto al exdiputado ibicenco Josep Ramon Balanzat de los delitos de abuso y acoso sexual a dos menores de edad, una alumna y el primo de esta, por los que fue juzgado los pasados 9 y 10 de mayo. El tribunal de la sección primera de la Audiencia considera que no hay pruebas suficientes de que el acusado «manoseara, besara y hostigara a los denunciantes con intención sexual». Los hechos por los que se juzgó al expolítico y profesor ibicenco ocurrieron en 2018 en la escuela de adultos de Sóller, donde trabajaba como docente.

La Fiscalía reclamaba una pena de siete años y medio de prisión por esos hechos, que fueron denunciados por los dos menores, la alumna de 17 años y el primo de esta, de 12.

El tribunal declara probado que Balanzat intercambió mensajes con su alumna, pero considera que en ellos no se aprecia un ánimo sexual ni considera que estos «causaran temor o desasosiego» a la joven. El fallo no es firme y puede ser recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Balears.

En el juicio celebrado este mes, Balanzat negó todos los cargos de los que ahora ha sido absuelto y apuntó a una venganza de la denunciante por haber dejado de sufragarle los gastos: «Le corté el grifo y se rebotó. Ella quería seguir tirando de la teta», se defendió el expolítico.

El profesor admitió haber enviado mensajes a la chica, piropeándola y pidiéndole fotos «y videollamadas en plan sexy», pero negó que hubiera en ellos «un ánimo morboso». En la sentencia, y sobre este punto, se afirma que del hecho de que el acusado le hubiera pedido a la alumna esta videollamada «no se puede deducir que le estuviera solicitando un favor sexual». «Estamos, sí, ante una conducta normalmente reprochable del acusado y de la que él mismo fue consciente [...]pero no ante una conducta de inconfundible contenido sexual generadora de una situación objetiva y gravemente humillante».

La Audiencia considera que no ha quedado probado tampoco que Balanzat hubiera ofrecido a la alumna «cantidad alguna de dinero para mantener relaciones sexuales» ni los «tocamientos referidos por la denunciante».

En cuanto a la denuncia del primo de la alumna, de 12 años, la sentencia afirma que su versión «carece de credibilidad para considerar probados los hechos que refiere». Este chico había asegurado que el acusado le había besado en los labios después de hablar con él en el centro educativo. «Hablé con él. Tenía problemas de identidad sexual», relató Balanzat. «Jamás hubo beso en la boca ni en la mejilla», negó con rotundidad el expolítico, ahora absuelto de los delitos por los que fue juzgado.