Cati Escandell, madre de Vanessa Patricio, la mujer de 33 años que murió el 9 de febrero de 2017 en un accidente de tráfico en la carretera del aeropuerto, ha mostrado hoy su dolor y su estupor ante la sentencia absolutoria a los acusados de causar la muerte de su hija. "Ha sido un mazazo en la cabeza", ha declarado a Diario de Ibiza la madre de la víctima, que asegura que no se esperaba en absoluto la absolución, "después de los cambios legislativos forzados por las protestas de los familiares de víctimas de accidentes en carretera ante el Congreso" de los Diputados.
La jueza del juzgado de lo Penal número 2 de Ibiza absuelve a los dos acusados por el accidente que costó la vida a Vanessa Patricio del delito de homicidio por imprudencia grave. Al conductor del Land Rover, le absuelve también del delito contra la seguridad vial por conducción bajo la influencia de las drogas.
La sentencia, adelantada por Periódico de Ibiza, sí condena a M. C. H., que conducía el coche que se incorporó al vial chocando con el todoterreno que después atropelló de muerte a la víctima, en concepto de autora de un delito de homicidio por imprudencia menos grave a las penas de 12 meses de multa (cuota diaria de seis euros) y a la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante 18 meses.
Sin imprudencia grave
En la sentencia, se recuerdan los hechos ocurridos la mañana de aquel día de febrero de hace seis años y se destaca que la conductora del SEAT compañera de trabajo de la fallecida en el concesionario Volkswagen, se incorporó al vial para ir a su trabajo reduciendo la velocidad y mirando por el espejo retrovisor, pero no por el retrovisor izquierdo. Las circunstancias excluyen que lo que hizo la conductora pueda calificarse como imprudencia grave, afirma la sentencia, que recuerda: "Conduce (M. C. H.) a velocidad moderada, adecuada a la vía y a la maniobra que pretende realizar", detalla.
Esta incorporación al vial de servicio provocó que el vehículo que conducía impactara contra el Land Rover Discovery que la adelantaba en ese momento. Como consecuencia del impacto, el conductor del todoterreno dio un volantazo con el fatal resultado del atropello a Vanessa Patricio, que esperaba en ese momento para cruzar la vía hacia su lugar de trabajo, y que murió en el acto.
Sobre este punto, la magistrada Martina Rodríguez recuerda en el fallo que el conductor del Land Rover no sobrepasaba en el momento del accidente la velocidad de 90 kilómetros hora. Y puntualiza: "Si ni las fuerzas del orden público se ponen de acuerdo, ni tampoco los peritos de las partes en sus respectivos informes, acerca de cuál era el límite de velocidad existente en ese punto donde tuvo lugar el accidente, y no existe ninguna señal ni indicativa ni de prohibición, ¿tiene que saberlo el ciudadano que circula por esa carretera?". "La pregunta -prosigue la sentencia- se contesta sola. Entiendo que con no sobrepasar el límite de velocidad genérico de 90 kilómetros por hora, el conductor cumple con el código de la circulación".
Posibilidad de apelación
Los dos abogados de la acusación particular pidieron en el juicio, celebrado en diciembre de 2022, la máxima pena para los dos conductores implicados en el accidente mortal por un delito de homicidio por imprudencia grave y añadían, en el caso del conductor del todoterreno, un delito contra la seguridad vial. El Ministerio Fiscal, por su parte, solicitaba una pena por un delito de homicidio por imprudencia menos grave a la conductora del SEAT y la absolución para el conductor del Land Rover.
La madre de la fallecida, que era madre de una niña de corta edad, no sabe aún si apelará contra la sentencia absolutoria: "Hemos de reunirnos toda la familia con los abogados y pensar qué vamos a hacer".