Hipotecas y compraventas siguen al alza en Ibiza mientras se desmoronan en el resto de España

La compraventa de viviendas y la constitución de hipotecas se desmoronan en toda España, según apuntan los últimos datos del Consejo General del Notariado. ¿En todo el país? No, dos irreductibles pequeñas islas del archipiélago balear se resisten a seguir esa ola y mantienen al alza ambas estadísticas. Ibiza y Formentera siguen a lo suyo, siguen siendo distintas.

La compraventa en Balears disminuyó en marzo un 16,1% respecto al mismo mes del año pasado, mientras que los precios cayeron un 6,1 %, según el Consejo General del Notariado. Y en el conjunto del país, la compraventa de viviendas cayó un 11,7% interanual en ese mes, en el que los préstamos hipotecarios para la adquisición de una casa se hundieron un 26,4% y los precios se abarataron un 2,6% en un contexto marcado por la subida de los tipos de interés para frenar la inflación y el encarecimiento de la financiación, lo que ha congelado las operaciones. Prácticamente todos los bancos han comprobado cómo, después de que los tipos se disparasen, los clientes dejaban de llamar a sus puertas. Si los bancos centrales querían enfriar la economía y reducir la cantidad de dinero en circulación para parar en seco (esto ya se verá) la inflación, lo han logrado…

...Menos en Ibiza y Formentera. Los últimos datos pormenorizados de los que se dispone, publicados por el Instituto Balear de Estadística, son de febrero, pero ya entonces se podía apreciar, al menos en Mallorca, una relajación de las compraventas y constitución de hipotecas. No así en las Pitiusas. Por ejemplo, en la mayor de las Balears cayeron las compraventas un 6,7%. Sólo se registraron en esa isla 1.904, la menor cantidad desde 2018 (con excepción de 2021, claro). Por el contrario, en las Pitiusas crecieron, interanualmente, casi un 22%: hubo 435 operaciones, la mayor cantidad (junto a la de 2016, que fue muy similar) desde el boom inmobiliario de comienzos del milenio.

El segundo ‘boom’

Tampoco (de momento) se ha resentido en Ibiza la constitución de hipotecas sobre viviendas. No sólo las operaciones se han incrementado un 35% en ese periodo, sino que el importe total ha crecido nada menos que un 100%, hasta los 103,4 millones de euros. Esta cifra es la más elevada de los últimos 16 años, lo que da una idea del cariz de este segundo boom del ladrillo (especialmente especulativo) que se está viviendo en el archipiélago pitiuso. Sólo 2006 (133 millones) y 2007 (115,7 millones de euros) superan la cifra actual. Eso sí, ahora es por 227 operaciones, de manera que la media de cada hipoteca se sitúa en los 456.000 euros, mientras que en 2006 fue sobre 853 (una media de 156.000 euros, 300.000 menos que actualmente), y en 2007 sobre 674 constituciones (172.000 euros de media por cada hipoteca).

En Mallorca, sin embargo, cayó un 3,7% el número de hipotecas (preludio de lo que, según los datos del Consejo General del Notariado, estaba por venir en marzo). Eso sí, aumentó el importe un 14,2%.

Habrá que esperar a los datos detallados de marzo y abril, pero lo más probable es que, en las próximas estadísticas, Ibiza siga siendo un mundo aparte en el universo de las compraventas y que el capital extranjero, principalmente centroeuropeo, continúe acaparando buena parte de las operaciones en el ladrillo, más dirigidas a la inversión (con fines especulativos o para aprovechar la corriente de los alquileres disparatados) que a adquirir una vivienda como residencia permanente o secundaria.

La mayor cantidad desde 2006

A los inversores (extranjeros o españoles de alto poder adquisitivo) que disponen de capital y para los que los precios de Ibiza son un chollo, los tipos de interés altos no suponen un freno. De ahí que ni siquiera en febrero, cuando el encarecimiento de la financiación ya era notable, se inmutaran aquí. Al contrario, el importe de la constitución de hipotecas en general (no sólo de viviendas) ha crecido casi un 226%, hasta alcanzar los 235 millones de euros. Es la cifra más alta desde el año 2006, cuando se llegó a los 298 millones de euros.

Y eso se debe no sólo al aumento de las cantidades hipotecadas en pisos y villas, sino también en naves y locales, que se ha disparado a casi 109 millones de euros en el inicio del año, una cantidad nunca vista: hay que remontarse a 2019 para encontrar la más cercana, 78 millones de euros.

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