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Infraestructuras: Puerto de Sant Antoni

La reforma del lado norte del paseo marítimo de Sant Antoni empezará en octubre

Supondrá una inversión de 728.000 euros e irá acompañada, posiblemente desde finales de 2024, de la reparación del muelle de abrigo, que sufre deterioro y que necesita una inversión de tres millones de euros

Juan Vicente Roselló, Josep Marí, Marcos Serra y Xavier Ramis, en la sede de Ports en Sant Antoni, esta tarde. | J.M.L.R. J.M.L.R.

Ports de Balears prevé invertir en los próximos tres años casi cuatro millones de euros en el puerto de Sant Antoni en un par de obras. La primera, que está previsto que comience en octubre de este año, tiene un presupuesto de 727.986 euros y contempla la reforma de la banda norte del paseo marítimo desde la intersección del paseo del Mar con la calle Santa Agnès hasta la rotonda de acceso al vial portuario, unos 350 metros, aproximadamente. Posiblemente dure unos cinco meses, de manera que posiblemente concluya en febrero de 2024.

Plano de las obras proyectadas. | J.M.L.R.

El propósito es que ese lado de la calle tenga una estética idéntica a la del sur, donde Ports ya intervino hace un par de años, según ha detallado esta tarde en rueda de prensa Josep Marí Ribas, Agustinet, conseller balear de Movilidad y Vivienda, que ha estado acompañado por el alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra; el director general de Transporte Marítimo y Aéreo, Xavier Ramis, y el gerente de Ports IB, Juan Vicente Rosselló. En realidad se trata de la segunda fase del proyecto de reforma de ese paseo, que cuenta con el visto bueno y la «complicidad», según Marí, del alcalde, que ha dicho estar «contento». No es para menos, pues de las arcas municipales no tendrá que pagar ni un euro de los alrededor de 150.000 euros que Ports invertirá en zona de influencia municipal. Serra sólo ha pedido que las obras «molesten lo mínimo en verano» y que se lleven a cabo cuanto antes.

La segunda obra es más compleja y se prevé, si todo va bien, que comience en septiembre de 2024 y finalice en mayo de 2026. Se trata de la reparación estructural del dique de abrigo, construido en los años 60 y que presenta problemas de permeabilidad como consecuencia del desgaste de las enormes piedras que lo conforman: «Se mueven y se descalzan», según ha explicado Juan Vicente Roselló, que ha añadido que se trata de un problema recurrente en los diques antiguos de Balears, como el de Fornells (Menorca). Como el proyecto no está concluido, se ha desgajado del de la reforma del puerto para que este último pueda empezar al acabar la temporada.

Se construirá una rotonda con adoquín rebasable en la intersección con la calle Santa Agnès para intentar mejorar allí la circulación, que es un cuello de botella y foco de habituales atascos en verano

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Paralelamente, Roselló ha informado de que están redactando un estudio de dinámica litoral para la regeneración de las aguas interiores de la bahía, que «van a morir al rincón noroeste e incluso depositan allí residuos». Le cuesta renovarse. Y ese es el objetivo del estudio: encontrar una solución para que se regeneren las aguas interiores de manera rápida.

Respecto a la reforma del paseo marítimo, se persigue unificar el embaldosado, pues hay zonas en las que conviven hasta tres tipos diferentes de baldosas. Las áreas correspondientes a la terrazas de los locales de ocio tendrá un pavimento distinto. Habrá nuevas canalizaciones urbanas, una mejora de la señalización, mejorará la estética y se construirá una rotonda con adoquín rebasable en la intersección con la calle Santa Agnès para intentar mejorar allí la circulación, que es un cuello de botella y foco de habituales atascos en verano, a veces hasta en invierno.


Nada previsto para la estación marítima

El conseller balear de Transportes no tiene previsto ningún uso para la estación marítima de Sant Antoni: «Habrá que pensar cuál será su uso futuro (...) No es el momento de definirlo ahora», dijo.

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