El Consell de Alcaldes quiere frenar "la mala imagen" que se da a los cruceristas en Ibiza

El Consell de Ibiza y los cinco ayuntamientos de la isla se proponen reforzar y coordinar el servicio de transporte para cubrir la llegada de cruceros al puerto de Vila y eliminar «la mala imagen» que se da a los pasajeros por «la falta de taxis y autobuses». El presidente, Vicent Marí, recuerda que «cada crucerista es un futuro turista y un prescriptor». «Hay que cuidar la imagen», resalta, al tiempo que señala que el problema, que «preocupa a todos», estriba en que los cruceristas desembarquen en el puerto «sin excursiones contratadas o un plan previsto previamente».

Por ello, el Consell de Alcaldes acordó ayer obtener «toda la información» y hacer «un esfuerzo de coordinación» para anticiparse y dar el servicio necesario a los cruceristas, según explicó al término de la reunión el presidente en presencia del resto de alcaldes de la isla, excepto el de Sant Joan, Antoni Marí Carraca, que se está recuperando de un problema de salud. En su lugar estuvo el primer teniente de alcalde, Andreu Roig.

El presidente incidió en la importancia de que los consignatarios y las navieras trasladen a los cruceristas toda la información sobre excursiones o las alternativas de transporte en el caso de que opten por visitar «por libre» la isla. Marí dijo que se sabe con suficiente antelación la hora de llegada de los cruceros, por lo que los taxistas de todos los municipios «se pueden coordinar» para atender las puntas de demanda.

Regulación de llegada de cruceros

Al ser preguntado sobre si es posible atender estos picos sin incrementar la flota de taxis y autobuses, Marí aseguró que «con los medios que se dispone actualmente, se puede mejorar mucho el servicio», siempre y cuando, insistió, se transmita a los pasajeros toda la información sobre las diversas opciones que tienen cuando desembarcan. El presidente también apuntó que la puesta en marcha de la nueva estación marítima de es Botafoc, cuya inauguración se está retrasando, ayudará a paliar este problema.

Durante la reunión del Consell de Alcaldes no se abordó, en cambio, la reivindicación que mantiene desde hace tiempo el Ayuntamiento de Ibiza para que, al igual que se ha hecho en Palma, se regule «un tope» de cruceros al día. La ordenación aprobada por el Govern balear limita la llegada simultánea de un máximo de tres cruceros al puerto de Palma, cuando en la programación de la Autoridad Portuaria de Balears de esta temporada se prevé la escala de hasta cuatro cruceros el mismo día en Ibiza. «Es excesivo», insistió el alcalde de Ibiza, Rafa Ruiz, que recalcó que en ningún caso se le puede considerar «anticrucerista» y que se está trabajando para lograr esta regulación.

«Cuando llegan tres cruceros a la vez, se ve lo que pasa», afirmó, en referencia al colapso que se produce en Vila, al tiempo que recordó que Ibiza es Patrimonio de la Humanidad y tiene una mayor densidad de población que Palma.

Sobre esta cuestión, el presidente del Consell se limitó a decir que «si se puede espaciar [la llegada de cruceros], mucho mejor», y recordó que desde antes de la pandemia, «se ha reducido de forma importante la llegada de cruceros a la isla».

Primer barómetro turístico de Ibiza

A través de una videoconferencia, el Consell de Alcaldes contactó ayer con los responsables de la Asociación de Análisis Turístico de Ibiza y Formentera (Ateif), dependiente de Fomento de Turismo, para conocer un avance del primer barómetro turístico que se ha hecho en la isla a partir de «más de 5.000 encuestas» sobre los servicios que utilizan los turistas o el grado de satisfacción, entre muchos otros parámetros. El presidente del Consell, Vicent Marí, explicó que ahora se pasará toda la información a los ayuntamientos para que analicen los datos y posteriormente se hará una presentación de los resultados. Marí rehusó adelantar ningún detalle y destacó que se trata de «un instrumento básico para la toma de decisiones. No tenemos un sistema de inteligencia turístico y es imprescindible para el futuro», añadió.

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