La operación contra el tráfico de drogas en el barrio de sa Penya, en la ciudad de Ibiza, bajo la muralla declarada Patrimonio de la Humanidad, ha finalizado con once detenidos, según detalló ayer en una nota de prensa la Policía Nacional de la comisaría de Ibiza a través de la Jefatura Superior de Balears.

Este operativo contra el narcotráfico se inició a primera hora del pasado lunes y se prolongó durante todo el día siguiente. En las dos jornadas se llevaron a cabo registros en varios domicilios de las calles Fosc y Vista Alegre, en los que participaron más de veinte agentes.

El operativo del lunes finalizó con la detención de cuatro presuntos narcotraficantes, mientras que el martes fueron detenidos otros siete, por lo que en total, «en el curso de la investigación, han sido detenidas once personas, todas ellas de nacionalidad española excepto una de origen polaco», apunta la nota policial.

Además, la Policía detalla que a siete de ellos les constan antecedentes por hechos similares.

La droga intervenida

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría de Ibiza han intervenido en estos dos días algo más de un kilo de cocaína, 25 gramos de heroína, un arma blanca de grandes dimensiones y básculas de precisión para pesar la droga que vendían.

«La presencia policial en el barrio de sa Penya permitió detectar como principal punto de venta de droga una vivienda en la que, además de distribuirse drogas, se facilitaba a los toxicómanos el consumo en su interior, constituyendo un narcopiso», detalla la nota.

La Policía añade que, tras varias investigaciones alrededor del punto de venta, se detectó que muchas personas se organizaban junto a la casa para vigilar y hacer tareas de seguridad.

Dado que «en estos puntos de venta los clanes que las dirigen únicamente suelen contar con la cantidad de droga necesaria para ir haciendo frente a la demanda diaria, los agentes profundizaron para ubicar el lugar que pudieran estar utilizando como almacén».

El almacén

Fruto de esta investigación, detectaron que «los investigados contaban con otra vivienda que empleaban como almacén, también en el barrio de sa Penya».

El comunicado del Cuerpo Nacional de Policía narra además que, cuando se reunió toda la información, se registraron las dos viviendas y en una de ellas (no se ha facilitado su ubicación exacta) se encontraron toda la droga intervenida, que estaba siendo almacenada.