El Consell de Ibiza sanciona con 20.000 euros un alquiler turístico ilegal en la Marina

La vivienda se publicitaba turísticamente en una página dedicada a este tipo de alquiler con un precio de 450 euros la noche

Redacción

El Consell de Ibiza ha resuelto interponer una sanción de 20.000 euros a un ciudadano español por comercializar una vivienda turística ilegal en el casco urbano de la ciudad de Ibiza. La vivienda, ubicada en la calle Emili Pou n.º 11, en el barrio de la Marina, se publicitaba turísticamente en una página dedicada a este tipo de alquiler con un precio de 450 euros la noche, con servicios como toallas, sábanas, TV, conexión Wifi, entre otros, y una tarifa adicional de 50 euros para limpieza, según informa el Consell en un comunicado.

Además, el anfitrión también disponía de esta vivienda comercializada en otro portal donde se anunciaba como ‘súper huésped’ con un número de registro que no se corresponde a la solicitud de inscripción en el registro insular de empresas, actividades y establecimientos turísticos.

Cuando el servicio de inspección turística del Consell revisó esta vivienda constató que había dos personas alojadas que habían hecho una reserva a través de un portal comercializador por una estancia de once noches.

La entidad insular tramitó el expediente sancionador por infracción en materia de turismo por la publicidad, contratación y comercialización de la vivienda sin haber presentado la correspondiente declaración responsable de inicio de actividad turística o la comunicación previa, por un importe de 20.000 euros. El anfitrión reconoció los hechos y la sanción quedó reducida en un 20 por ciento, quedando la multa en 16.000,80 euros.

Lucha contra el intrusismo

El conseller de Ordenación Turística y Lucha contra el Intrusismo, Mariano Juan, ha señalado que a lo largo de esta legislatura la lucha contra el intrusismo es uno de sus "objetivos principales", y que han dado "importantes pasos en este sentido”, y ha recordado el protocolo con Airbnb que supone buscar a los infractores. “Hemos conseguido con la reforma de la ley turística elevar las sanciones por estos hechos que ahora son de 40.000 euros, con calificación de ‘muy grave’”, ha señalado el conseller.

Juan ha seguido relatando los avances dados esta legislatura en materia de inspecciones turísticas, como el impulso dado desde el Consell de Ibiza con la reforma de ley para que los inspectores turísticos puedan hacer reservas de incógnito, y se ha conseguido que Airbnb identifique a los anfitriones de las viviendas anunciadas y comercializadas ilegalmente.

“Insistimos en que con sanciones no se arreglará el problema: el Govern de Baleares tiene que aceptar la propuesta del Consell de Ibiza para cerrar pisos turísticos ilegales cuando se denuncien, es la única manera de enviar un mensaje contundente a los infractores y evitar que esta problemática continúe”, ha concluido el conseller.