Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Dos acuíferos de Ibiza, declarados vulnerables por contaminación de nitratos

Las masas de agua subterránea están en Sant Antoni y Sant Joan y la contaminación procede desde hace años de «fuentes de la actividad agraria»

Mapa de los suelos contaminados por nitratos de Balears CAIB

La conselleria de Medio Ambiente del Govern prepara un decreto para declarar 26 masas de agua o acuíferos subterráneos vulnerables a la contaminación por nitratos agrícolas en Balears. De estos acuíferos, dos se encuentran en la isla de Ibiza, concretamente en los municipios de Sant Antoni y de Sant Joan. Ambos están afectados por «la delimitación de las superficies declaradas como zonas vulnerables por contaminación de nitratos procedentes de fuentes agrarias», apunta la conselleria.

En el caso de Sant Antoni, el área afectada es de 0,1 kilómetros cuadrados y en el del municipio de Sant Joan de Labritja, de 7,7 kilómetros cuadrados.

Todas estas zonas superan los 37,5 miligramos de nitratos por litro de agua, el máximo permitido por la Unión Europea, en su mayoría procedentes de abonos y fertilizantes que se han utilizado para los cultivos a lo largo de los años.

En comparación en el resto de Balears, las zonas afectadas pueden considerarse mínimas en Ibiza y son inexistentes en Formentera, ya que especialmente la isla de Mallorca pero también Menorca (en menor medida), tienen sus acuíferos afectados por la presencia de nitratos que superan los niveles marcados por la UE.

El Consell Consultiu ha emitido un dictamen que exige al Govern que revise el borrador de decreto por la falta de análisis del impacto económico que ello supondrá para el sector agrario, la falta de adaptación a nueva normativa de ámbito estatal y que demuestre con claridad el origen agrícola de la contaminación de los acuíferos.

La directora general de Recursos Hídricos, Joana Maria Garau, explicó a Diario de Mallorca (del mismo grupo que Diario de Ibiza, Prensa Ibérica), que se trata de una normativa que ordena la Unión Europea y que la «contaminación se debe al uso de fertilizantes agrícolas orgánicos durante décadas que provoca que las plantas absorban el nitrógeno y ello pase a los acuíferos que albergan el agua subterránea».

También apuntó que es cierto que hay otras fuentes de contaminación, además de la actividad agraria, y ello lo determina otro decreto sobre zonas difusas que delimita las contaminaciones de las aguas subterráneas.

Joana Maria Garau, respecto a las consideraciones del Consultiu de que se vuelva a revisar el borrador de decreto, indicó: «Estamos preparando un escrito para contestar el dictamen donde especificamos que nuestro cometido es la delimitación de las zonas vulnerables y el grado de contaminación de las masas de agua.

El impacto económico y sus posibles restricciones debe ser Agricultura quien redacte un plan específico».

Compartir el artículo

stats