Las últimas tormentas que han tenido lugar en Ibiza han llevado a embarrancar algunos barcos. Uno de ellos es el velero 'La vida de Lukas', que ha acabado destrozado en las rocas de la costa de s'Estanyol.

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Sant Josep ha procedido a la descontaminación de emergencia de la embarcación. Según la información facilitada por el Consistorio, el velero quedó embarrancado en la bahía de Portmany hace unas semanas, pero los vendavales de la pasada semana acabaron por lanzarlo contra las rocas de s'Estanyol, destrozándolo.

Mientras se realizaban la gestiones para dar con el propietario de 'La vida de Lukas', el Ayuntamiento procedió a inspeccionar el velero para evaluar los daños. Entonces se detectaron los depósitos llenos de combustibles y unos motores con aceite que, si el barco seguía deteriorándose, acabarían en el mar.

El Consistorio, consciente de la previsión meteorológica de fuertes temporales para los próximos días en Ibiza, extendió ayer unas barreras anticontaminación en torno a la embarcación y a retirar líquidos contaminantes y productos químicos que había su interior. Esta intervención ha supuesto un coste de 5.000 euros a las arcas municipales.

¿Quién es el propietario?

En cuanto a la identidad del propietario del velero, a quien se le reclamará el coste de toda la operación, está resultando complicado localizarlo porque el velero no está matriculado. Por eso también se han iniciado los trámites para declararlo como residuo para que el Ayuntamiento pueda efectuar su retirada de manera subsidiaria si fuera necesario.

Desde el departamento de Litoral el concejal Josep Guasch lamenta que "esta situación está siendo muy frecuente en los últimos años por el número de embarcaciones que fondean de manera incontrolada a la bahía de Portmany sin ninguna autorización".

Guasch ha reiterado que "a pesar de todos los esfuerzos que se han hecho desde el Ayuntamiento y los que se seguirán haciendo para evitar el fondeo irregular a la costa y minimizar el riesgo que esto supone, es imprescindible la colaboración del resto de administraciones implicadas, principalmente la Demarcación de Costas y Capitanía Marítima para identificar y actuar contra los responsables de estas prácticas".