El Ayuntamiento de Sant Antoni presentó ayer su proyecto de presupuestos para el ejercicio 2023, que asciende a 31,5 millones de euros e incorporará 13 millones de euros del remanente de tesorería. Las cuentas se votan hoy en el Pleno ordinario de noviembre. Se trata del presupuesto más alto de la historia del Consistorio, según resaltó el alcalde, Marcos Serra, un 5,13% superior al que el presente ejercicio. Las partidas con un mayor incremento son las de Seguridad y Orden Público (7%), Medio Ambiente (10%) y Personal (13,7%).
Serra recordó que este incremento en el gasto municipal se produce a pesar de haber reducido el tipo de gravamen del IBI al 0,7%, lo que supone una bajada del 10,2% en los últimos dos años. La recaudación municipal aumenta en materia de impuestos directos en 1,2 millones de euros y alcanza los 14,2 millones y en tasas y precios públicos sube en 850.000 euros, a través de los que se prevé recaudar 8 millones de euros. Desciende en medio millón de euros la recaudación del impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras, que pasa de 2 a 1,5 millones de euros.
Inversiones
El primer teniente de alcalde, Joan Torres, dio cuenta de la relación de inversiones para el próximo ejercicio, que ascienden a 1,6 millones de euros en el presupuesto ordinario, pero que alcanzan los 15,2 millones de euros gracias a la incorporación de 13 millones de euros del remanente. Dentro del gasto con cargo al remanente, los proyectos más relevantes por su importe son: el refuerzo de firmes y bacheos (5 millones de euros), la reforma de la avenida Isidor Macabich (3 millones de euros), el embellecimiento de Sant Mateu (1,3 millones de euros), o las obras de dependencias policiales en el Passeig de la Mar (500.000 euros).
También se contemplan otras inversiones como la eliminación de barreras arquitectónicas, la mejora del campo de fútbol de Can Coix o la nueva escoleta de Sant Rafel. Dentro del presupuesto ordinario, los principales proyectos previstos son la instalación de nuevos puntos de recarga para vehículos eléctricos, las obras de mejora de las calles Vedrà y Vedranell (desde la avenida Doctor Fleming hasta es Pouet), y que Torres indicó que se pararán durante la temporada estival, o la instalación de señalización turística inteligente.
Gasto
La concejala de Economía y Hacienda, Eva Prats, se encargó de desgranar las cuentas para el próximo ejercicio, último de esta legislatura.
En cuanto al incremento del 13% en el capítulo de gasto de personal, se debe a la puesta en marcha de la subida de sueldos en la administración pública a nivel nacional y al aumento de plantilla previsto en la segunda fase de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) aprobada recientemente en el Pleno, que incluye la revisión de 36 puestos y la creación de 11. Se reforzarán los departamentos de Obras Públicas, Urbanismo, Servicios Sociales, Informática y Policía Local. Respecto a este último departamento, está prevista la incorporación de cinco operadores de atención ciudadana a las dependencias de la Policía Local, con el objetivo de liberar a los agentes de estas tareas telefónicas. También está prevista la incorporación de dos nuevos agentes de Policía Local.
En el área de Medio Ambiente, la subida en el presupuesto está relacionada con mejoras en la contrata de recogida de basura, debido a la incorporación entre las competencias municipales del mantenimiento de torrentes en zona urbana. También en 2023 se iniciarán las tareas de campo dentro del Plan de Prevención de Incendios Forestales y se aumenta en seis la plantilla de operarios destinada al cuidado de parques y jardines. En materia de Servicios Sociales, la partida se mantiene en números similares a los del ejercicio 2022. Aumentan un 33% las subvenciones a organizaciones asistenciales como Cruz Roja o Cáritas Sant Antoni y Prats aseguró que en caso de que estas organizaciones necesiten más fondos se acudirá al remanente de tesorería.
PSOE-Reinicia anunció ayer a través de una nota que votará en contra de los presupuestos «por la reducción en el capítulo de inversiones de un 60% y la falta de proyectos en materia de acceso a la vivienda y de seguridad ciudadana».
