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Los avisos por posible maltrato infantil casi se cuadruplican tras el apagón por la pandemia

Han crecido especialmente las notificaciones por casos graves de agresiones y de abuso sexual

Los avisos por posible maltrato infantil casi se cuadruplican tras el apagón por la pandemia

Los avisos por posible maltrato infantil casi se han multiplicado por cuatro tras el apagón por la pandemia. El año del confinamiento el Registro Unificado de Maltrato Infantil (RUMI) experimentó un notable descenso en el número de avisos y en 2021 han aflorado muchas más notificaciones. Así, si en 2020 el sistema registró 2.529 alertas de niños que podrían estar siendo maltratados, abusados o en situación de negligencia, en 2021 llegaron 8.696 avisos.

La mayoría de los avisos (un 65%) se calificaron como graves. Los casos graves de abuso sexual y especialmente los de maltrato físico son los que han aumentado más tras el año del confinamiento.

La consellera de Asuntos Sociales, Fina Santiago, explica que durante la reclusión sanitaria hubo casos de maltrato leve o moderado que no fueron detectados y por tanto no se pudo intervenir, con lo que la situación empeoró y han aflorado ya como casos graves. Además, señala la consellera, la situación de crisis pueden hacer aumentar este tipo de situaciones de desprotección de menores.

Quién usa el RUMI

El RUMI está pensado para que los profesionales que están en contacto con menores (sanitarios, profesores...) puedan avisar cuando vean señales de que un niño o joven está sufriendo maltrato físico o psicológico; siendo víctima de negligencia en el cuidado por parte de sus padres; o padeciendo abusos sexuales. Es habitual que profesionales de distintos ámbitos coincidan y emitan una alerta por el mismo menor. En 2021 de hecho las 8.696 notificaciones recibidas se referían a 4.863 menores.

Los trabajadores de servicios sociales son los responsables del 42% de los avisos registrados, mientras que los profesores y los maestros notifican casi el 40% de los casos.

Este hecho es una muestra más del importante papel que tienen las escuelas más allá de su papel formativo y las consecuencias que supuso mantenerlas cerradas por la crisis sanitaria. El año del confinamiento los avisos bajaron un 58% respecto al año anterior.

La Policía notificó el 8% de los casos mientras que otro 8% llegó de los servicios sanitarios.

Desde estos dos ámbitos, el policial y el sanitario, es más frecuente que se detecten los casos más graves, como sucedió por ejemplo el pasado día cinco, cuando un médico de familia dio el aviso al acudir a su consulta un padre con su hija de dos meses con hematomas por todo el cuerpo y el fémur fracturado, entre otras lesiones. El médico dio aviso y ambos padres fueron detenidos.

Casos más graves

De los avisos recibidos, 1.889 fueron por maltrato físico (1.273 considerados graves, lo que supone un 600% más que un 63% que en 2019, el año previo a la pandemia). Un total de 3.097 alertas inscritas en el RUMI en 2021 fueron por negligencia (1.885 de tipo grave) y 2.720 por maltrato psicológico (1.733 por casos graves) y 950 por abuso sexual (825 considerados graves, el doble que en el año prepandemia).

Santiago cree que los casos de negligencia no se han incrementado tanto tras la pandemia entre otras cosas por medidas que se adoptaron en coordinación con Educación durante el confinamiento, como la Tarjeta Comedor, que permitía a los usuarios de comedor escolar comprar alimentos para paliar la falta de este servicio.

¿Qué pasa cuando se registra una notificación en el RUMI? Entre un 30 y un 35% de los avisos requieren un seguimiento, lo que no siempre implica una denuncia: los casos graves se derivan a Protección de Menores y pueden acabar en una retirada de la guardia o de la tutela del menor mientras que los casos leves o moderados se derivan a servicios sociales.

Estos episodios puede que se solucionen ofreciendo acompañamiento y orientación a la familia sobre ayudas que pueden solicitar o medidas que pueden adoptar. Por ejemplo, si un profesor detecta que un niño llega con hambre al colegio se habla con la familia para ver qué esta sucediendo y si es por una cuestión de falta de recursos se les puede derivar al servicio que corresponda para conseguir alimentos.

Balears, a la cabeza de avisos

Illes Balears es de las comunidades autónomas con el índice más alto de avisos registrados en el sistema RUMI, un número que además no hace sino crecer año tras año desde su puesta en marcha en 2015.

La consellera Fina Santiago achaca este hecho a que se esfuerzan mucho en formar a los profesionales que trabajan con menores, con lo que el conocimiento de la herramienta y la sensibilización es cada vez mayor, con lo que hay cada vez más avisos registrados en el sistema RUMI.

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