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La excavación del terreno del hospital de Jesús halla un centro de producción agraria púnico

Descubre una extensa red de zanjas antiguas de viña del siglo II a.C. y una pequeña vivienda vinculada a la explotación, pero en muy mal estado de conservación, que reproduce el modelo tan extendido en toda la isla

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La excavación del terreno del hospital de Jesús halla un centro de producción agraria púnico Vicent Marí

La excavación arqueológica en la finca Cas Doctor Martí, junto al campo de fútbol de Jesús, donde el empresario farmacéutico Juan Tur Viñas proyecta construir un hospital privado, ha descubierto un pequeño centro de producción agrícola de época tardopúnica, a partir del siglo II a.C., según la datación de los restos de cerámica asociados a las zanjas de cultivo antiguas desenterradas.

También se han hallado los restos de una pequeña vivienda vinculada con la explotación agraria, aunque según el arqueólogo Josep Torres, codirector de la excavación junto a Élise Marlière y Alberto Marcos, la estructura es «muy superficial», con «piedras muy desplazadas» por la actividad agraria que se ha desarrollado hasta la actualidad.

La datación de esta casa se sitúa también en el siglo II a.C. hasta el VI d.C. en época bizantina. Sólo se ha excavado una parte de la vivienda, pero el arqueólogo considera que podría estar formada por dos habitaciones y un patio exterior descubierto.

El pavimento de la vivienda es de tierra compacta. Se ha hallado un muro de dos metros mínimamente conservado y otro más largo en la zona del patio. «Sabemos que es una casa por la acumulación de piedras que se han derrumbado. Todas ellas se han movido de un lado a otro con la actividad de arado moderna. Ninguna piedra se halla en su posición inicial», indica Torres, que señala que, aunque en principio «no tenga mucho valor monumental porque está muy machacada, sí tiene mucho interés para documentarla».

También se han excavado dos pozos, uno de época púnica y otro bizantino, que está relleno de material (se podía usar como escombrera), además de los restos de una cubeta de vino, sólo la base, sin paredes, de un metro y medio de largo por uno de ancho.

Zanjas de cultivo

Tal como ya se había previsto en el plan de actuación, se ha desenterrado un entramado reticular de zanjas antiguas de cultivo con «una profundidad importante», que va del siglo II a.C. hasta la actualidad. «Lo raro sería que no existieran estas estructuras de plantación en una zona situada a los pies del Puig de ses Torres. Todos los solares del entorno también las tienen», explica.

Los restos hallados forman parte de un pequeño centro de producción agrícola, en concreto de viña y vino, modelo tan extendido en la isla. «Los comerciantes debían pasar por aquí para comprar las ánforas que salían del puerto. En Ibiza no había grandes centros de producción, sino que la suma de todos los pequeños dan el volumen y la importancia de la exportación del vino en Ibiza», apunta Josep Torres.

Asimismo, se ha recuperado mucho material de cerámica de uso doméstico y de contenedores de vino, así como «alguna figurita característica y monedas que ayudan a datar los distintos estratos de la casa». Como monedas púnicas del II a.C. hasta un follis (moneda) producido en Cartago a finales del siglo VI (bizantina). De hecho, esta zona está «muy esquilmada» por buscadores de metales con detectores, por lo que sólo se ha podido recuperar «una pequeña parte», afirma Torres.

Dos sectores excavados

Durante cuatro meses, los arqueólogos de Antiquarium han dirigido a una cuadrilla de hasta 20 personas para decapar el extenso terreno y excavarlo parcialmente. Este se ha dividido en seis sectores y, por ahora, se ha completado la excavación en dos, salvo la parte de la vivienda, que ha quedado pendiente.

La información de los dos sectores se ha enviado al Consell para que resuelva si se deben conservar los restos. No se ha hallado por ahora nada monumental para museizar in situ, pero el arqueólogo destaca que se tiene que excavar el cien por cien del terreno para documentar toda la información. De hecho, se han recogido muchas muestras de tierra para estudios de carpología (de las semillas y el polen).

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