El pasado mes de mayo, un grupo de 100 jubilados de Bilbao que estaban de vacaciones en Ibiza sufrieron la anulación de su vuelo de vuelta gestionado por Vueling.
Desde una empresa de reclamaciones informan de que algunos de estos afectados decidieron interponer una reclamación a Vueling a través de Erreklamatu, al mismo tiempo que aclaran que el resto de pasajeros aún están a tiempo de reclamar.
El 4 de mayo 140 personas llegaron al aeropuerto de Ibiza para embarcar en el vuelo VY 3975 con destino Bilbao. 100 de estos pasajeros eran jubilados que habían visitado la isla dentro de los viajes organizados por el Imserso. El avión de Vueling debía despegar a las 21.35, pero poco antes del embarque la compañía aérea informó de que saldría con retraso. Errklamatu explica que los pasajeros subieron al avión a las 23.15, pero 20 minutos después les hicieron bajar porque el aeropuerto de Bilbao había cerrado y el aterrizaje en él era inviable.
Nuevamente en la terminal de Ibiza, los viajeros esperaron dos horas hasta que la compañía organizaba dónde alojarlos esa noche porque no volarían hasta el día siguiente. Salieron del aeropuerto a las dos de la madrugada hacia un hotel, pagándose el taxi con su propio dinero y sin haber cenado.
La empresa de reclamaciones añade que entre los pasajeros, la mayoría de edad avanzada, se encontraban insulinodependientes, una señora en silla de ruedas...
Finalmente los 140 pasajeros volaron a Bilbao el 5 de mayo. Algunos por la mañana, otros por la tarde y ninguno en vuelo directo como el original, sino haciendo escala en Barcelona.
De los 100 jubilados, 16 se organizaron para reclamarle a Vueling una compensación. Finalmente la compañía ha decidido indemnizará a cada pasajero con 250 euros más los gastos de desplazamiento –taxis– que tuvieron que afrontar. Esta indemnización constituye el máximo que marca el reglamento europeo para incidencias en vuelos de menos de 1.500 kilómetros.