Como ya se publicó a finales del pasado mes de mayo, Santa Eulària se sumará próximamente al más de medio centenar de ayuntamientos españoles que cuentan con un censo del ADN de los perros para identificar las heces que queden en las calles.
Con este sistema no solo se multa a los vecinos que incumplan las ordenanzas de tenencia de animales en sus propios lugares de residencia, sino que, al existir una base de datos compartida, sirve para sancionar a los propietarios de animales que no recojan las heces de su mascota en otros términos municipales.
Este último fue el caso de un individuo de Xàtiva que se encontraba en Alboraia y dejó la deposición de su mascota en la vía pública. Estos municipios valencianos cuentan con el censo de ADN canino y la Policía Local alborayense pudo localizar en la base de datos al visitante incívico y remitirle la sanción.
Y encima se saltó las restricciones
Pero si esta multa sirvió para dar conocer la efectividad de estos análisis se debió a que, a pesar de llegar en marzo del año pasado, la muestra de las heces se había obtenido en enero, cuando la localidad de Xàtiva se encontraba confinada por la alta incidencia del covid. Así que también reveló que el infractor se había saltado las restricciones sanitarias.
Santa Eulària ha sacado ahora el concurso público para adjudicar este servicio, con un presupuesto base de 185.107 euros por cuatro años, prorrogable a un quinto. El plazo para presentar las ofertas finalizará el 5 de septiembre.
El precio máximo de la extracción de ADN a los perros y su inscripción en el registro será de 44 euros
Cuando entre en marcha este registro, todos los propietarios de perros del municipio tendrán la obligación de identificarlos a partir de su ADN, que quedará dentro de la base de datos y en la chapa identificativa del animal. Para ello, se tomarán muestras de saliva con un hisopo, una técnica completamente indolora.
Según la licitación redactada por Santa Eulària, el precio de estas extracciones de ADN será de un máximo de 44 euros, que después puede reducirse en función de la oferta que resulte ganadora en el concurso.
Durante los primeros meses desde el inicio del contrato, Santa Eulària pagará la mitad de este gasto a los propietarios de un solo perro. En cambio, si tienen más de uno, la subvención cubrirá el coste íntegro a partir del segundo animal.
5.000 perros
Para esta ayuda municipal en el registro de canes, el Ayuntamiento dispone de 100.000 euros. En caso de que esta cantidad no se agote antes de tiempo, los propietarios podrán beneficiarse de ella, una vez que entre en marcha el servicio, hasta el 31 de enero, según consta en la memoria del proyecto.
El departamento de Medio Ambiente de Santa Eulària calcula que la población de perros en el municipio puede superar los 5.000 ejemplares.
Los infractores se enfrentarán a multas que oscilan entre los 60 y 1.500 euros
La empresa adjudicataria también deberá hacerse cargo de la extracción y los análisis del ADN de las heces para identificar a qué perro corresponden, a partir de los restos recogidos en la calle que envíe el Ayuntamiento. El resultado de estas pruebas se dará en un plazo de 20 días.
Las muestras contaminadas con material genético de más de un perro quedarán descartadas, pero, si se identifica solo a uno, el propietario se enfrentará a una sanción de entre 60 y 1.500 euros. Además, esta iniciativa facilitará que se pueda controlar a los animales que han sido abandonados por sus dueños.