Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La falta de ‘stock’ en Ibiza reduce un 38% la matriculación de turismos

Formentera compra un 120% más de motos que de coches

La falta de ‘stock’ en Ibiza reduce un 38% la matriculación de turismos DIB

No está el mundo como para que recupere su fuelle la industria del motor, ese espejo de la economía que en el caso de las Pitiusas sigue reflejando que se vive una situación anómala: hay demanda, pero no se puede satisfacer. En el primer semestre del año, se matricularon en estas islas 3.181 vehículos, que si bien supone una mejora sustancial respecto a 2021 (47% más, 1.017 unidades más) aún está por debajo de la barrera precovid, la del ejercicio de 2019: son 360 coches y motos menos que hace tres años, un 10,1% menos.

El porcentaje es mayor si se tiene en cuenta sólo a Ibiza, donde se tramitaron 2.526 matrículas, 510 menos que en 2019, lo que supone una caída del 16,8%. Al menos ha mejorado respecto a 2021 un 29,9%. Pero aparte de lo ocurrido durante la pandemia, es el peor dato de los últimos 19 años, con la excepción de 2014 (2.234), 2013 (2.402) y 2009 (2.111), el inicio de la gran crisis. La isla no ha logrado recuperar los registros previos a aquella debacle económica, cuando lo normal entre 2004 y 2007 era dar el alta de más de 5.000 automóviles y motocicletas en junio. Una señal positiva es que el mes pasado se matricularon 577 vehículos, casi un 14% más que tres años atrás.

En Formentera, sin embargo, las 655 matriculas de este año suponen una mejora de casi el 30% respecto a 2019 (150 más que entonces, pero no hay que olvidar que su población es mucho menor que la de Ibiza), mientras que en junio descendieron a 104 las registradas, un 32% menos que en el mismo mes de hace tres temporadas.

Casi todo el peso de la reducción de matriculaciones recae en los turismos, que no terminan de arrancar. En lo que va de año se gestionaron las altas de 1.099, un 38% menos (678 unidades menos) que antes de la crisis sanitaria. Es la menor cantidad (al margen de los dos peores años de la pandemia) de las últimas dos décadas. En Formentera ha mejorado esta estadística, al pasar de 128 a 198 matriculaciones de automóviles (+54,7% en tres años).

Para José Antonio Colomar, presidente de la Asociación Empresarial de Concesionarios o Distribuidores de Automoción de Ibiza y Formentera (AECA), la caída de las ventas de automóviles es «fruto de la escasez de stock». Hay marcas que no están teniendo problemas al respecto porque no dependen de terceros países, como China, para abastecerse de componentes, «como las asiáticas Hyundai, KIA y Toyota, cuyas ventas han bajado menos que el resto», pero las demás, «pese a tener demanda, no son capaces de lograr ese stock para atender la demanda», explica Colomar.

¿Y no se vende menos dada la incertidumbre económica? Ese factor también influye, según Colomar: «Aunque hubiera suficiente stock, no estaríamos en los números de 2019. Quizás no se caería a ese 38% en turismos, pero seguiríamos por debajo del mercado de hace tres años, quizás un 20% o un 25% por debajo». Actualmente, ese diferencial «se está cubriendo con la venta de coches de segunda mano», indica. «Lo vemos en el sector del taxi, que nunca había comprado tantos seminuevos. No encuentran nuevos en almacén, ni aquí ni en la península», añade.

Otro sector que podría animar el mercado es el del rent a car, pero no tienen suficientes unidades para atender su demanda: «Pese a que quieren comprar más vehículos, no podemos conseguirles lo que quieren». Además, «los primeros canales de ventas que las marcas cortaron fueron los menos rentables». Como el de los rent a car , que «se beneficia de grandes descuentos». De ahí que prefieran atender «más a la demanda particular y de empresa», confiesa.

Sí han mejorado los registros referentes a las matriculaciones de motos: 989 entre enero y junio (a tiro de piedra, sólo un centenar de unidades, de los turismos), un 33,3% más que en 2019. Quizás debido tanto a la carestía del combustible como a la incertidumbre económica, los compradores escogen estos vehículos de dos ruedas por ser más baratos en dos sentidos: gastan menos y son menos costosos que los de cuatro ruedas. En Formentera se han matriculado más del doble de motos (+120%) que de coches: 436 motocicletas (198 autos), casi un 25% más que hace tres años, si bien el incremento en esa isla está más relacionado con el alquiler de motorini para turistas y es habitual en esta época del año.

Por motorizaciones, la gasolina, con 1.650 matriculaciones en el primer semestre en Ibiza, recupera gas en comparación con 2021 (+48,8%), pero lo pierde si se compara con 2019 (-20%, 411 menos). En Formentera, por el contrario, crece un 28%, hasta las 585 unidades.

Híbridos y diésel, a la par

El diésel sigue de capa caída, incluso respecto a 2021: 320 vehículos de este motor fueron matriculados en medio año, 10 menos que en el mismo periodo del pasado ejercicio (-3%) y un 41% menos que en 2019. Los híbridos están a punto de superarlos: 303, un 50% más que hace un año y un 197% más que hace tres (201 más que entonces). En Formentera, 50 registrados, un 35% por encima de la cifra del pasado ejercicio y un 1.150% más que la de 2019. Son más del triple que los diésel (15).

Si se suman a los eléctricos (72), ya son más en Ibiza que los diésel, pero ojo, porque esta motorización está experimentando un bache: se dieron de alta 41 vehículos menos de este tipo que en 2021 (-36,3%) en Ibiza, y sólo tres en Formentera, seis menos (y cuatro menos que en 2019). «El motivo principal -detalla el presidente de AECA- es que no nos llegan los vehículos eléctricos debido a la crisis de componentes y de semiconductores. Los plazos de entrega son bastante largos, más que el de un híbrido e igual que el de un híbrido enchufable. Hay demanda de ese tipo de vehículo, pero no llegan en tiempo y forma».

Compartir el artículo

stats