Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Hippy Market de Ibiza: verano con altibajos en el mercadillo de Punta Arabí

Los vendedores del mercado hippy más antiguo de la isla coinciden en señalar que junio y julio están siendo más flojos en ventas que el temprano arranque de la temporada en abril

15

Mercadillo de Punta Arabí María Parejo

El mercadillo de Punta Arabí abre puntual sus puertas a las 10 de la mañana como cada miércoles desde hace casi medio siglo, ya que nació en1973. Centenares de turistas ya curiosean entre los puestos a esa hora y algunos compran artículos, sobre todo bisutería y ropa.

Mientras unos se prueban ropa y pulseras, otros optan por tomar algo fresco para calmar la sed, con el termómetro marcando ya los 30 grados.

Los vendedores, algunos veteranos del mercadillo, atienden a los clientes que llegan sin parar. «Este negocio está aquí desde que tengo nueve años, mis padres ya lo llevaban. Ahora lo he heredado yo, como la mayoría de los puestos de mis compañeros», cuenta Victoria, una de las artesanas que vendía ayer en su puesto, que está junto a la entrada del mercadillo. Ella, como muchos otros artesanos, se mueve por diversos mercados: «Voy a Cala Llonga, al de los domingos en Sant Joan y a las ferias artesanas que organiza el Consell». Victoria, como otros de sus colegas, acude en invierno a los mercadillos que permanecen abiertos . «También hacemos talleres y confeccionamos los complementos» que luego venderán en sus puestos, detalla.

Lina Escandell lleva su puesto desde hace más de 25 años y se dedica a vender ropa para niños, que confecciona mientras no tiene clientes. Aunque las ventas funcionaron muy bien durante los primeros meses de esta temporada, las cosas han cambiado, y a peor: «Mayo y junio han sido meses buenos para el negocio, pero en lo que va de este mes de julio las ventas han caído», asegura Escandell, que únicamente se dedica a la venta de su género en el mercadillo de Punta Arabí y que durante estos últimos dos años no pudo hacerlo a causa de la pandemia.

Amparo Fernández se encarga de un puesto donde vende piedras semipreciosas y colgantes realizados con ellas. Aunque su puesto hace quince años que está en el mercadillo, ella solo lleva dos dedicada a la venta de cuarzos y otro tipo de piedras. «Nosotros nos dedicamos a la venta de cristales y otras piedras naturales. Aparte de vender aquí, también vamos a los mercadillos de Las Dalias y Sant Joan, donde, además, también podemos seguir trabajando en invierno», cuenta Fernández.

Algunos de los turistas que se han acercado al mercadillo vienen de distintos lugares de España y otros llegan desde países extrajeros. «Es la primera vez que vengo y me he acercado a conocerlo, ya que mi marido ha venido más veces aquí», comenta Hind Elyazan, una turista de Girona. «En los últimos diez años habré venido al mercadillo unas siete veces, además, creo que también he estado en el de Las Dalias» duda Jasmin Kaufmenn, una turista suiza que suele ir a este tipo de mercados y que suele comprar en ellos brazaletes, vestidos «coloridos» y algún que otro bolso.

Kaufmenn compra en el puesto de Encarna López, una vendedora que lleva más de cuatro décadas de su vida dedicadas a él. Pasa toda la temporada de verano en es Canar. Encarna coincide con Lina Escandell en el descenso de ventas de este verano en comparación con el inicio de la temporada en abril: «Empezó fuerte, aunque ha habido algún mes más paradillo, en concreto el pasado junio», aseguró.

Susi Rodríguez y José Bedeño han viajado a Ibiza desde Valencia. «Es la primera vez que venimos aquí, aunque en Ibiza hemos estado más veces. Nosotros siempre vamos a este tipo de mercados, como Las Dalias o todos los que veamos de este estilo», explica la pareja de valencianos, quienes suelen comprar ropa de estilo hippy y también «muy ibicenca».

En los puestos de es Canar no hay únicamente vestidos y pulseras. Gora Thioune es de Senegal y vende gafas de sol y figuras de madera o artículos que trae desde su país natal. «Llevo 37 años aquí y ahora mismo solo vendo en Punta Arabí, anteriormente sí que estaba en otros mercadillos», explica Thioune, que considera que este año la temporada es más floja que la del año pasado, pese a las restricciones sanitarias de entonces.

Turistas de todas partes

Familias británicas pasean por el mercadillo este miércoles. «Es la segunda vez que venimos, aunque no solemos ir a este tipo de mercados cuando viajamos», afirma Amanda Jones, una de las turistas del Reino Unido. Este año también se dejan ver muchos turistas nacionales.

Elena Yañez, de Cantabria, no es la primera vez que visita Ibiza con su familia. «Nunca habíamos visitado este mercadillo, aunque cuando viajamos a la isla frecuentamos este tipo de espacios. No hemos pensado en comprar nada en concreto, si vemos algo que nos gusta lo compramos», asegura mientras sale de ver uno de los puestos con sus familiares.

«Es la primera vez que venimos y ha sido difícil encontrarlo. Hemos sabido del mercadillo porque nos han informado en el hotel en el que nos hospedamos», indica Nerea Gómez, también procedente de Cantabria, y a quien le gusta visitar los mercadillos de las ciudades que visita.

Compartir el artículo

stats