En apenas dos meses y medio, el Ayuntamiento de Ibiza ha detectado 129 pisos turísticos ilegales en el municipio, principalmente en ses Figueretes, l’Eixample, Puig d’es Molins, paseo marítimo y la zona de Platja d’en Bossa que pertenece a Vila. La información referente a estas viviendas fue trasladada ayer mismo a la Oficina Antriintrusismo del Consell, desde donde aseguraron que estudiarán uno a uno todos los casos.
Estas viviendas serán inspeccionadas por la máxima institución insular que, en lo que va de 2022, ha realizado 170 actuaciones inspectoras en referencia a posibles alquileres ilegales. «Ahora mismo se están tramitando 65 expedientes, cuya suma de sanciones podría superar el millón de euros», recordaron.
El dato aportado por el Ayuntamiento duplica esta cifra y surge del estudio encargado a la Fundació Universitat Empresa para actualizar el padrón municipal de habitantes y del censo de viviendas, que estiman puede estar acabado a finales de año. «Los pisos tienen que ser, prioritariamente, para la gente trabajadora», apuntó el alcalde, Rafa Ruiz, al tiempo que dijo que «el alquiler turístico no tiene cabida en nuestra ciudad, lo que debería compartir el resto de la isla».
Competencia desleal
En este sentido, apuntó que esta actividad supone una «competencia desleal» a los establecimientos turísticos reglados y provoca que a muchas familias les incrementen el precio del alquiler o les dejen en la calle porque plataformas como Booking o Airbnb ofrecen «grandes cantidades de dinero a los propietarios, lo que es un caramelo muy goloso», lamentó.
Por su parte, el concejal de Vivienda, Aitor Morrás, alegó la «necesidad» de tener datos concretos para hacer una radiografía que permita hacer «una política activa y eficiente» en relación a la vivienda. «La vivienda tiene que tener uso residencial, no puede estar mercantilizada», subrayó.
Actualmente hay 23.759 viviendas en Vila y los encuestadores ya han verificado la situación del 32% de las mismas, un total de 7.750. Sin embargo, unas dos mil personas no han querido responder a la encuesta y a un total de 13.777 no las han localizado. De momento, quedan 1.900 inmuebles pendientes de visitar.
Se trata de la primera batida, pero los técnicos realizarán dos más, llamando puerta por puerta, hasta conseguir una respuesta. Finalmente, se hará una ronda telefónica.
Entre los pisos de los que han obtenido respuesta, se ha detectado que hay 157 vacíos y 23 con una situación mixta.
Visitas a las viviendas
La directora del proyecto, la investigadora postdoctoral en Geografía Crítica Urbana, Sonia Vives, y el catedrático de la UIB, Onofre Rullán, explicaron que algunas de las viviendas han sido visitadas en más de una ocasión.
En el caso de las que se destinan a alquiler turísticos, especificaron que son los propios clientes los que les han ofrecido dicha información cuando el encuestador llamó a la puerta de la casa. Asimismo, señalaron que el estudio cuenta con una fase en la que constatarán el consumo de agua y electricidad de determinadas viviendas, ya que servirá de indicativo para conocer el uso que se le da al inmueble.
Por ejemplo, si pasan dos años sin consumo de agua, se declarará vacío, sostuvo Vives.
Padrón
El estudio también aporta datos de las personas empadronadas en el municipio. En este sentido, el padrón de Ibiza cuenta con 51.190 personas y los técnicos ya han revisado la situación del 28,4% de ellas (15.072).
Así, 12.352 habitantes viven en la casa donde están empadronados, mientras que 2.720 se ha constatado que no.
Aun quedan 36.118 personas pendientes de revision, lo que supone el 71,5% del total de empadronadas.
