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La nueva orden insular de carga del taxi en Ibiza regulariza por fin el uso del GPS

El decreto ley que entrará en vigor el jueves también elimina la preferencia muinicipal en las paradas

Los taxistas de Sant Josep protestan con una pitada de una caravana de taxis frente a la sede del Consell

La caravana de taxistas de Sant Josep que protestó ayer frente a la sede del Consell. | D. I.

El Consell de Govern celebrado en Ibiza aprobó un decreto ley, que entrará en vigor el jueves, con la nueva orden insular de carga y descarga del taxi que sustituye a la de 2012 y que por fin regulariza el uso en toda la isla del servicio de atención de llamadas con GPS.

Con la aprobación de esta norma se resuelve un problema enquistado durante muchos años y que había abierto una crisis en Vila, el único municipio con un convenio firmado con los operadores de GPS, por la imposibilidad de permitir, sin una regulación aprobada, que el servicio de radio taxi de la ciudad otorgara carreras a vehículos de otros municipios.

A partir del jueves, el servicio del taxi en la ciudad de Ibiza podrá funcionar como en el resto de municipios de la isla, en los cuales, a diferencia de Vila, no hay ningún control (ni régimen sancionador ante posibles incumplimientos) sobre el servicio del GPS.

Resuelto el problema del GPS, la principal novedad de la nueva orden insular del taxi es la eliminación de la preferencia en las paradas en el caso de que haya más personas esperando que vehículos en la cola. Este cambio afecta a todas las paradas de la isla, pero tendrá una especial incidencia en el aeropuerto. A partir del jueves, cuando haya gente esperando en la parada, los taxistas, sean del municipio que sean, podrán cargar sin dar prioridad a los conductores de Sant Josep.

Precisamente, este cambio normativo, consensuado por el Consell y los ayuntamientos de la isla, ha causado descontento en taxistas de Sant Josep por la perdida de la prioridad de la parada de la isla que más movimientos genera. Por ello, para evidenciar su malestar, varias decenas de taxistas de este municipio pasaron ayer hasta tres veces haciendo sonar el claxon de sus vehículos frente a la sede del Consell mientras el Govern aprobaba la nueva regulación del sector. Esta caravana de protesta causó retenciones de tráfico en la avenida de España.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, asumió «la responsabilidad» de su ejecutivo pero recordó, en declaraciones a los medios de comunicación, que la nueva regulación insular ha sio consensuada por el Consell y los cinco ayuntamientos. Dicho esto, Aremengol dijo que el sector del taxi es «un servicio público» e, independientemente del municipio de procedencia de un taxi, lo que «debe prevalecer es que la persona que está esperando en la parada pueda coger un taxi lo ante posible». «Es lo lógico», dijo, al tiempo que puntualizó que cuando no hay colas, los taxistas del municipio de la parada siguen manteniendo su preferencia.

Subida exigua de las tarifas

La nueva orden insular también desbloquea las tarifas, que no se actualizaban desde 2014 y que ahora suben apenas un 3,3%, un porcentaje insuficiente. Sin embargo, ahora el Consell está habilitado para aprobar por su cuenta el incremento de las tarifas.

El decreto ley estará en vigor durante dos años, hasta que el Govern balear apruebe un reglamento. De hecho, el Govern balear ha optado por la vía del decreto ley, a petición del Consell de Ibiza, para resolver ya de cara a este verano el problema del GPS y el bloqueo de las tarifas fundamentalmente. El procedimiento para aprobar un reglamento precisa como mínimo de un plazo de 10 meses. El Govern proyecta aprobar un reglamento del taxi de ámbito balear, con una parte específica para la regulación de Ibiza.

La nueva orden insular también incluye la novedad de que en el momento en que el vehículo supere la velocidad de 110 km/h el taxímetro quede en suspenso sin aumentar el coste de la carrera.

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