En medio de un pinar entre Santa Gertrudis y Sant Llorenç, cerca del Centro de Exámenes de Conducir, acabó ayer un coche de alquiler. El vehículo, un Seat Ibiza de color negro, lo conducía una mujer que quiso cruzar la montaña campo a través, sin tener en cuenta que allí no había ningún tipo de camino transitable, según ha podido saber Diario de Ibiza.

La conductora avanzó unos metros entre la vegetación pero el costado derecho del vehículo acabó chocando al parecer contra un pino, que destrozó la puerta y la ventanilla del copiloto y la mujer quedó atrapada, aunque sin ningún tipo de lesión. Según testigos presenciales, la conductora "no iba en condiciones para conducir", pero si estaba bajo los efectos del alcohol o las drogas se desconoce ya que no intervino ningún cuerpo policial.

Hasta el lugar se desplazaron efectivos de Grúas Simonet, que se hicieron cargo del rescate del vehículo, que duró tres horas y media.