Más de un centenar de pescadores de las tres cofradías de las Pitiusas: Ibiza, Sant Antoni y Formentera, pararon ayer quedando amarrada toda la flota en sus puertos base. Los representantes de estos tres colectivos de profesionales explicaron que el sector secunda la huelga convocada en toda España y apoyada por la Federación Balear de Cofradías de Pescadores. El motivo de la protesta es el elevado precio del combustible, por lo que el sector pide al Gobierno medidas para rebajarlo.
El litro del gasoil para este sector estaba ayer a 0,966 euros, aunque el pasado 9 de marzo alcanzó los 1,21 euros. A pesar de esa pequeña bajada los pescadores coinciden en que con esos precios es muy difícil mantener su actividad.
En Ibiza, entre las cofradías de Vila y la de Sant Antoni hay tres barcas de arrastre y unas 60 embarcaciones de arte menor, y suman entre los dos colectivos profesionales unos 70 profesionales de la pesca. En Formentera afecta a dos arrastreros, las 22 barcas de artes menores y a 37 pescadores.
El mal tiempo de la última semana ya impidió la actividad de la flota pesquera pìtiusa y el paro de estos tres días que coincide con el mal estado de la mar tiene sus repercusiones en las pescaderías, donde el pescado fresco es prácticamente inexistente y solo se ofrece congelado.
El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Ibiza, Antoni Tur, manifestó: «Estamos siguiendo el paro al igual que todo el sector de Balears», y añadió que la intención «es seguir hasta el 23 de marzo, ya que se están moviendo hilos con el Ministerio y, en teoría el miércoles, nos dirán algo. Estamos a expensas» del avance de las negociaciones, subrayó.
El patrón de la Cofradía de Sant Antoni, José Antonio Castelló, matizó que ayer no trabajaron pero que hoy y mañana «veremos si paramos porque cada armador sabe lo que puede aguantar, depende de si evoluciona [la negociación], si se produce o no algún cambio».
Iván Pérez, de la Cofradía de Formentera, reconoció que paraban «aprovechando el mal tiempo y para apoyar al sector. Ahora estamos pendientes de la reunión prevista el miércoles con el ministro a ver qué pasa».
Mientras, la práctica totalidad de la flota pesquera de Balears se sumó ayer a esa primera jornada de paro nacional y permaneció amarrada.
Seguimiento en Balears
El presidente de la Federación balear de Cofradías de Pescadores, Domingo Bonnín, explicó que en Mallorca, Ibiza y Formentera el seguimiento del paro había sido del cien por cien, mientras que en Menorca habían salido a faenar «una o dos embarcaciones».
Bonnín resaltó la «tranquilidad» con la que transcurrió la jornada de paros a la que se habrían sumado las aproximadas 300 barcas que forman la flota de las islas y de las que dependen, entre patrones y trabajadores, unas 450 personas.
El presidente de las cofradías recordó que la solución «real y efectiva» a la situación de «ahogo» del sector pasa por la bonificación del precio del combustible, como ya se ha hecho en otros países. Calificó otras medidas como las bonificaciones de las tasas, las rebajas del IVA o las bonificaciones de la Seguridad Social, como «intentos por la puerta de atrás de compensar el alza de precios».
