Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Salud factura más de 778.000 euros a turistas alojados en los hoteles covid de Ibiza y Formentera

La factura media de cada uno de los más de 500 visitantes extranjeros en el hotel covid es de 1.450 euros

Imagen de archivo del hotel puente de Platja d’en Bossa.

La conselleria balear de Salud ha facturado casi 780.000 euros a turistas extranjeros alojados en los tres hoteles puente de las Pitiusas durante la pandemia, según detallan desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera. En total, la cifra de facturas emitidas asciende a 778.714 euros.

El alojamiento en los tres establecimientos, ubicados en Platja d’en Bossa y Cala de Bou en Ibiza y en Migjorn en Formentera, es gratuito para todos los pacientes, indican desde Salud, pero no así la atención que se presta. Lo que se factura a los usuarios son el rastreo de los contactos estrechos, las pruebas que se van realizando durante el aislamiento o los traslados efectuados por el 061, tanto de sus alojamientos turísticos a los hoteles covid como desde éstos al hospital si fuera necesario, detallan.

Por los hoteles puente de las Pitiusas han pasado un total de 1.569 personas (1.397 en Ibiza y 172 en Formentera). De ellos, prácticamente la mitad han sido turistas, un total de 762 (un 48,56%. Ahí hay que distinguir entre los turistas nacionales, a los que no se factura nada porque su atención está garantizada en todo el país, que fueron un total de 225, y los extranjeros, a los que sí se cobra la atención sanitaria que reciben en el sistema público de salud durante sus vacaciones. Así, en los hoteles puente de las Pitiusas, desde que se abrió el primero en 2020, han alojado a 537 visitantes de otros países, que suponen uno de cada tres de los usuarios de estas instalaciones, según los datos facilitados por la conselleria y el Área de Salud pitiusa.

A cada uno de ellos se les habría facturado, de media, 1.450 euros. En el caso de los turistas con tarjeta sanitaria de la Unión Europea, el Estado la remite a los países de origen donde, al final del año, se calcula la diferencia entre el gasto sanitario de los turistas españoles en cada uno de esos países y los de esos territorios aquí. Cuando los visitantes extracomunitarios viajan con un seguro, la conselleria pide el pago a la aseguradora. Si no lo tienen, es cuando se les cobra a los propios pacientes. Este es el funcionamiento no sólo para la atención prestada a turistas de otros países en los hoteles puentes sino para cualquier uso que hagan estos visitantes de la sanidad pública.

Desde el Área de Salud recalcan la diferencia entre facturado y cobrado. Los casi 800.000 euros es lo que se reclama, pero lo cobrado finalmente ronda el 80% del total. Es decir, que hay un 20% de morosidad, un porcentaje que Salud intenta reducir.

El coste de los tres hoteles puente de las Pitiusas ha sido de alrededor tres millones de euros, según los datos de la conselleria y el área sanitaria. Por los dos establecimientos iniciales, el de Platja d’en Bossa y el de Formentera, Salud ha abonado dos millones y medio de euros. A ellos habría que sumar lo que se pagó por los apartamentos de Cala de Bou, que estuvieron operativos tres meses, el verano pasado: 297.000 euros por mes a los que hay que sumar una cantidad variable en función de la ocupación que registró el establecimiento en cada momento. Desde Salud recuerdan que en todos los casos la contratación de estos establecimientos se hizo «por el procedimiento de urgencia».

Un total de 25,3 euros por persona y día

Esto ha significado, según cálculos realizados por la conselleria balear de Salud, un coste de 25,3 euros por persona y día en estos establecimientos, destinados a acoger tanto a positivos o contactos estrechos de las islas en cuyas viviendas no pudieran garantizar su aislamiento, los migrantes arribados así como a sus contactos estrechos y a los turistas en estas mismas situaciones. La inmensa mayoría de últimos, explican desde el área sanitaria, estaban alojados en hoteles en el momento en el que tuvieron que aislarse, ya que a los que estaban en villas y casas les resultaba más fácil hacerlo sin tener que trasladarse.

Tres de cada diez de los usuarios de los hoteles puente desde que estos se pusieron en marcha, en julio de 2020, han sido residentes en la isla, 469 en total: 353 en Platja d’en Bossa, 31 en Cala de Bou y 85 en Formentera. Los migrantes, 332, han estado todos en el establecimiento de Vila.

El contrato de los dos hoteles covid que aún están abiertos acaba el 31 de marzo. En estos momentos no acogen a ningún huésped y permanecen en estado «latente», por si fuera necesario acoger a alguien. Salud y Bienestar Social están valorando si utilizarlos para acoger a refugiados de Ucrania, como se ha hecho en Mallorca.

Compartir el artículo

stats