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Los taxistas de Ibiza amenazan con trabajar fuera en sus días de descanso y Morrás responde: «Serán piratas»

Este verano operarán 146 taxis estacionales, los mismos que en 2021, tras la negativa de los conductores a aumentarlos en 28

Caravana de protesta de los taxistas de Vila por el descanso obligatorio en temporada. | VICENT MARÍ

El presidente de la Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza, Alejandro Cardell, echa un nuevo pulso al segundo teniente de alcalde de Vila, Aitor Morrás, al anunciarle la posibilidad de eludir, durante la temporada de verano, el día de descanso obligatorio a la semana trabajando «fuera del municipio».

Cardell lanzó este desafío ayer a Morrás en el transcurso de una reunión convocada por el Ayuntamiento para abordar el nuevo plan de licencias de taxi estacionales, entre otras cuestiones, y en la que volvieron a enfrentarse por los descansos obligatorios. Según algunos de los asistentes a la reunión, Cardell advirtió a Morrás que, aunque le obligue a parar su vehículo un día a la semana, nada le impediría trabajar ese día en otros municipios de la isla.

Tras la reunión, al ser preguntado por este diario, Morrás confirmó lo que había dicho Cardell y advirtió de que, de hacerlo, «actuaría de forma irregular como un taxi pirata más». «Y el Consell tendrá que controlarlo», dijo, en referencia a que el Ayuntamiento no tiene competencias para actuar fuera de su municipio. Ahora bien, el segundo teniente de alcalde agregó que si el Ayuntamiento reuniera «pruebas» de que un taxi con licencia de Vila está trabajando fuera del municipio en día de descanso, podría actuar por incumplimiento del calendario de días de descanso. También se estaría saltando la ley de transportes. «Se arriesgan a perder la licencia», advirtió Morrás.

El responsable del departamento de Movilidad propuso a los representantes de los taxistas que la flota de taxis estacionales del próximo verano fuera de 174 vehículos, 28 más que el año pasado (seis más por la previsión de incremento de demanda más 22 para compensar los descansos obligatorios). Sin embargo, los taxistas consideraron que no era necesario este incremento y Morrás aceptó mantener la misma flota de taxis temporales que el año pasado (146).

Pulso por el GPS

Asimismo, el Consistorio notificó oficialmente ayer a la asociación mayoritaria de taxistas que preside Cardell que tiene un plazo de cinco días para dejar de prestar servicios con el GPS a vehículos de otros municipios. Previamente, en la reunión Morrás insistió que iba «en serio», según algunos de los asistentes consultados por este diario, y que iba a rescindir el convenio del GPS. «Tendrán que pasar a Nitax», dijo, en referencia al segundo operador del municipio que actualmente está paralizado porque sólo cuenta con ocho taxistas.

El representante de Nitax en Ibiza, Antonio Torres, asegura que, en 2018, cuando comenzó a operar en Vila contaba con medio centenar de taxistas. De hecho, la entrada de Nitax, recuerda, sirvió para que el GPS de la asociación mayoritaria se viera obligada a bajar sus precios por el servicio.

Nitax no puede competir

Sin embargo, Nitax «no puede competir con el otro GPS» porque éste ofrece servicios de fuera del municipio, incumpliendo el reglamento de Vila. Esto fue lo que provocó la pérdida de sus asociados. «Nosotros respetamos el reglamento y pedimos que todos juguemos con las mismas reglas. El Ayuntamiento tarda mucho en hacerlo cumplir», resalta Torres, que es taxista y se vio forzado también a pagar la cuota del GPS de la asociación mayoritaria de taxistas para no perder trabajo.

Torres asegura que Nitax está «preparado» para activar en un plazo de «tres días» el programa en todos los taxis de la ciudad para cubrir el «cien por cien» del servicio en el caso de que finalmente el Ayuntamiento se vea obligado a rescindir el convenio del GPS que gestiona la asociación de taxistas que preside Cardell.

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