Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La vida bien vivida de Pepe Roselló, el fundador de Space Ibiza

Xescu Prats ha plasmado en el libro 'Pepe Roselló. La Ibiza vivida' más de 130 horas de conversaciones con el empresario 'portmanyí'

Xescu Prats, Pepe Roselló y la editora, Neus Escandell, posan frente a Diario de Ibiza. Vicent Marí

643 páginas, decenas de fotos del archivo de la familia Roselló, 130 horas de conversaciones grabadas y un año y medio de trabajo. El resultado es el libro ‘Pepe Roselló. La Ibiza vivida’, editado por Balàfia Postals, y en el que el periodista Xescu Prats relata la vida del fundador de la discoteca Space y uno de los empresarios más emblemáticos y que más huella ha dejado en la Ibiza contemporánea. Un relato biográfico que sirve como punto de partida para rememorar cómo era la isla antes del boom turístico y su evolución posterior. Estaba previsto que se presentara el libro el 7 de enero, a las 12 horas, en la terraza del Club Nàutic de Sant Antoni, pero el acto se ha suspendido al ser uno de los participantes contacto estrecho de un contagiado de covid.

«Es un placer leer los artículos que Xescu publica en Diario de Ibiza y pensé que era la persona adecuada para este proyecto», explica Roselló. «Yo no le conocía personalmente», señala Prats, «y al tratar con él he descubierto a una persona con muchísimas facetas, un hombre complejo y con una trayectoria que ha ido en paralelo a las transformaciones que ha vivido la isla».

Aquel Sant Antoni

Roselló nació el 21 de septiembre de 1936, en plena Guerra Civil. El padre de Roselló era militar y murió joven. Su madre se quedó al cargo de sus cinco hijos y el abuelo materno ejerció de padre. Los recuerdos de infancia nos evocan una isla muy distinta de la actual. «Lo que ahora conocemos como el West entonces era el barrio de casas bajas de sa Raval. En los tancons que había detrás de las casas, donde ahora hay terrazas de restaurantes, es donde las familias hacían matances». «Recuerdo los olores de la casa, mi abuela en la cocina, el fuego siempre encendido, la madera, la vaca en el corral», rememora el empresario.

Los Roselló eran unos ‘privilegiados’ ya que, al ser huérfanos de militar, tenían a su disposición una cuenta en una panadería. Ese pan luego lo repartían entre amigos y familiares: «Éramos una piña». Una Ibiza precaria, donde parecía que nunca pasaba nada, que vivía aislada del mundo hasta que, de pronto, todo cambió.

Pepe Roselló, de niño, junto al refugio de la calle Cristòfol Colom, en el actual West de Sant Antoni. Archivo familia Roselló

El camino del éxito

En la segunda parte del libro, Roselló y Prats dibujan un retrato de la transformación que se inicia en Sant Antoni a finales de la década de los cincuenta: «El antiguo barrio de sa Raval se transforma en el lugar más glamuroso de la isla, que acoge intelectuales, turistas, gente sofisticada», explica Prats. En ese momento, Pepe Roselló tiene un golpe de suerte: una quiniela le permite abrir su primer negocio, el restaurante S’Olivar. Después haría lo propio con El Rincón de Pepe y el Celler El Refugio. Pero el gran salto se produciría dos años más tarde.

«Yo estaba en Suiza para aprender hostelería de verdad. Trabajaba de camarero y allí coincidí con un holandés llamado Ko Dekker, que pasaba los veranos en Sant Antoni. Me dijo que iba a adquirir la sala de fiestas Capri y me propuso que fuera su socio», explica Roselló. Fue su inicio como empresario del ocio nocturno, una carrera que alcanzó su culminación con la fundación de la discoteca Space en 1989.

¿Cuál es el secreto del éxito de Pepe Roselló? Xescu Prats tiene su teoría: «Pepe se preocupa del ambiente, de que la gente se encuentre a gusto. Cuando entra en una discoteca te dice ‘la barra debería estar ahí’, o te analiza las luces, los espacios, la música. El área económica siempre la ha delegado, pero con el acierto de dejarlo en manos de gente cercana, un equipo muy potente de gente ibicenca de plena confianza».

Prats también destaca su compromiso con la isla: «Siempre ha intentado que su beneficio se convirtiera en un beneficio para la gente de la isla, y ha ayudado a iniciativas sociales, culturales y deportivas».

A lo largo de su vida, larga y bien vivida, Roselló ha tenido la oportunidad de tratar a infinidad de famosos y celebridades de todo tipo -en el libro hay un buen surtido fotográfico- aunque él destaca a los artistas Elmyr de Hory y César Manrique, y a la soprano Renata Tebaldi, a quien acompañó en una gira por la antigua Unión Soviética. A sus 85 años, el empresario señala que su objetivo es «vivir, vivir y vivir», y asegura que liberar todas estos recuerdos le ha servido para «sentirme en paz conmigo mismo».

Roselló en la cabina de Space con Fatboy Slim en la fiesta del 25 aniversario de la discoteca. Archivo Space

A principios de los años 70, presentando una actuación musical en el Playboy Club. Archivo familia Roselló

De tertulia con don Juan de Borbón en el Playboy Club, a finales de los años 70. Archivo familia Roselló

Compartir el artículo

stats