La primera mesa redonda de la jornada de ayer del Foro Marino sirvió de escaparate para que diversas empresas e instituciones expusieran las buenas prácticas que están llevando a cabo para compensar el impacto que tienen sus actividades sobre el medio marino.
«Todos tenemos que barrer nuestro trocito de acera. Unos tienen una acera enorme y otro más pequeña, pero responsabilizarnos de nuestra parte», explicó Sandra Benbeniste, moderadora del debate y también portavoz de sostenibilidad del grupo Iberostar, quien señaló con esta metáfora la necesidad de que las empresas asuman su parte de responsabilidad en la lucha contra el cambio climático. ¿Asunción sincera de responsabilidades y compromiso con el clima o lavado de cara a costa del ecologismo? Debate complejo y lleno de matices y aristas, y que dejo en manos del lector.
En primer lugar, Marcos Marí, representante del grupo de trabajo de Marinas y Clubes Náuticos, explicó que estas instalaciones en Eivissa han realizado un importante esfuerzo durante los últimos años para adoptar todas las directrices ambientales, que incluyen la instalación de redes para canalizar las aguas grises de las embarcaciones y la gestión de los residuos que se generan en las marinas. «El objetivo es caminar hacia que los barcos sean de cero emisiones, con lo que instalaremos puntos de recarga energética en los puertos deportivos», explicó Marí.
Jorge Martín, jefe de Calidad, Medio Ambiente e Innovación de Autoridad Portuaria de Balears, desgranó dos proyectos en los que están embarcados: por un lado, que los barcos puedan tener una conexión a media tensión mientras estén en puerto para evitar que los motores auxiliares de los buques consuman fuel; y por otro lado, una iniciativa tendente a que el puerto de Ibiza sea más autosuficiente en su gestión de la energía, optimizando el uso de la pérgola solar del aparcamiento
Antonio Calvo Roy, director de sostenibilidad de Red Eléctrica Española, expuso el proyecto para reforestar dos hectáreas de pradera de posidonia en la bahía de Pollença y las políticas para minimizar el impacto que tienen en estas praderas las conexiones submarinas de transporte de energía. Finalmente, Sandra Benbeniste, en nombre del grupo Iberostar, desgranó algunas d e las políticas ambientales que han implementado, como la apuesta por el producto de kilómetro cero, la descarbonización de sus instalaciones y la mejora en el reciclaje, así como lo que definió como un camino hacia el «turismo responsable».
