El proyecto de Ibiza Inteligente arrancará con el control del aforo en 33 playas y la geolocalización de 15.000 viviendas rurales

El Consell de Ibiza proyecta que a partir del próximo verano se pongan en marcha las cámaras de control del aforo en 33 playas de la isla para que los ciudadanos y las instituciones dispongan en tiempo real de la información del número de usuarios que se encuentran en estos espacios y sepan si se rebasa la capacidad límite. Esta será la primera aplicación práctica del proyecto Ibiza, Turismo Inteligente y Sostenible, que ejecuta la UTE Vodafone-KapschIbiza con un coste global de casi 4,2 millones de euros, según explicaron ayer en rueda de prensa el vicepresidente segundo del Consell de Ibiza, Javier Torres, el director insular de Innovación, Xavi Santamaria, y el director de Vodafone en Balears, Antonio Álvarez. Los ciudadanos accederán a esta información a través de una aplicación de móvil.

Para controlar el aforo de las playas, se instalará un sistema de cámaras de visión artificial y un software para la gestión de los datos. Aún está pendiente la elección de todas las playas y la firma de los convenios con los ayuntamientos. Torres puntualizó que se ha cuidado la integración en el paisaje de las cámaras.

Vodafone gestionará el proyecto Ibiza Smart Island por cerca de 4,2 millones de euros

En la primera fase del desarrollo del proyecto también se contempla la geolocalización de 15.000 viviendas rurales con las rutas de acceso a las mismas para facilitar la actuación de los servicios de emergencia en caso de que sea necesario. Torres explicó que el Ayuntamiento de Sant Joan ya cuenta con esta herramienta, pero ahora se prevé «mejorar y dar una vuelta para ampliarla al resto de la isla». Formentera también tiene geolocalizadas las viviendas rurales de la isla.

El responsable de la compañía telefónica Vodafone en Balears explicó que en lo que resta de año se ejecutarán unos 430.000 euros del presupuesto global y, al cierre de 2022, un millón de euros. La ejecución del proyecto está previsto en 25 meses y, según Antonio Álvarez, la parte más cuantiosa se llevará a cabo en la última fase, a partir de 2023.

El proyecto también contempla la instalación de cámaras en nueve aparcamientos públicos de la isla (el del Multicines, Cas Dominguets y es Gorg en Vila; Cala Salada y ses Variades en Sant Antoni ; el parking subterráneo situado detrás del Ayuntamiento de Santa Eulària y Benirràs, en Sant Joan) para que los ciudadanos también puedan conocer al instante si hay plazas vacantes.

También se contempla la instalación de 160 paneles en las paradas de autobús más concurridas de la isla para que los ciudadanos puedan conocer el tiempo de espera hasta la llegada del siguiente vehículo. En estos paneles habrá también sensores para medir la calidad del aire y la contaminación acústica. Se colocarán sensores en otras zonas de Ibiza para conocer la calidad del aire y el nivel de decibelios. En total, se recogerá información de 250 puntos distintos de la isla.

Cinco boyas marinas

También habrá cinco boyas en el mar para medir los parámetros ambientales de este medio. Dos de ellas se colocarán en el noreste de la isla (en la playa de Portinatx y la Reserva Marina de Tagomago), otra en la Reserva Natural Illots de Ponent, en la bahía de Portmany, en el Parque Natural de ses Salines y la playa de Porroig.

Además, se instalarán cuatro cámaras de detección de incendios forestales (sistemas optrónicos con analítica de vídeo), que, según el vicepresidente segundo, cubren buena parte del territorio insular. En concreto, se ubicarán en Sant Josep, Sant Llorenç, Sant Antoni y Sant Joan.

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