La cantaora Estrella Morente dejó ayer su impronta flamenca en el festival Brisa de Portmany, que regresaba tras un año de paréntesis y por primera vez al aire libre, en Sa Punta des Molí de Sant Antoni. También era la primera vez que Estrella Morente actuaba en la isla, a la que se siente muy unida, por lo que acudió a sus raíces más flamencas en un recital lleno de magia. La granadina estuvo arropada por un gran elenco de artistas, entre ellos su hijo, Curro Conde Morente, que está haciendo sus primeros pinitos sobre los escenarios. El festival fue abierto por otra cantaora, la gaditana María Terremoto.