El juez titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, Santiago Pinsach, ha emitido un auto en el que dispone que el joven ibicenco M.A.M.F., en prisión preventiva por un presunto delito de intento de homicidio, puede quedar en libertad provisional con el depósito de una fianza de 5.000 euros. Es la cuarta vez que el abogado del detenido, Fernando Pamos de la Hoz, reclama la libertad de su cliente.
Entre los argumentos que el juez expone en su auto para conceder la libertad provisional al preso preventivo, incluye «la reciente prórroga y, sobre todo la indeterminación del plazo de la declaración de estado de alarma dictado en el país por alerta sanitaria, con la obligación de confinamiento legalmente impuesta y los controles policiales previstos al efecto». El magistrado opina que esta situación es «un claro factor a considerar para estimar mitigado o matizado el riesgo de fuga, sin que pueda afirmarse en estos momentos cuánto va a durar dicha situación».
El juez también alude a «las demás circunstancias personales alegadas por el recurrente», como su juventud -tiene 20 años-, los vínculos familiares y la estabilidad domiciliaria en la isla, algo que, a su entender, «permite también estimar razonable la posibilidad de conjurar el riesgo de fuga mediante otras medidas en situación de libertad, tales como la prestación de fianza, la prohibición de salida de la isla y la entrega de pasaporte o documentación de identidad».
M.A.M.F. se entregó a la Policía Local de Santa Eulària el pasado 21 de enero tras atacar y herir con un cuchillo al novio de su expareja, que también resultó herida leve en una mano. Tres días después de la agresión, el juzgado ordenó el ingreso del joven en el centro penitenciario de Ibiza.
Ya en la primera petición de libertad, su abogado argumentaba que el acusado cuenta con «absoluto arraigo en su domicilio de la isla desde su nacimiento, contrato de trabajo, vida laboral y una hija de la que es soporte y sustento». Añadió la defensa que carece de antecedentes, que es una persona muy joven, que es su primer ingreso en prisión y que «compareció voluntariamente» ante la Policía «cuando tomó conciencia de lo que podría haber sucedido».
En su último recurso, el abogado del joven apeló a una resolución de la ONU que, ante la amenaza de contagio por coronavirus en los centros penitenciarios, «insta a poner en libertad a quien no sea estrictamente necesario que permanezca preso». El miedo al contagio va en aumento en el centro penitenciario de la isla tanto por parte de los reclusos como de los propios trabajadores.
Varios abogados reclamaron la libertad provisional de presos preventivos con base a este temor. Estas reclamaciones han sido rechazadas con excepción de esta última, que permite la libertad provisional con fianza de M.A.M.F., al que también imponen una orden de alejamiento respecto de la persona a la que agredió con un cuchillo, un ataque que, según se explica en el auto, «habría sido susceptible de ocasionar la muerte [de la víctima] en caso de no haber recibido la asistencia médica pertinente». Por este motivo, añade el juez, la agresión «se situaría en el ámbito de la calificación de homicidio-tentativa, con margen punitivo de 5 a 10 años de prisión».
Fiscalía
Fiscalía
La Fiscalía se opuso a la libertad provisional del detenido. Previamente, antes del alargamiento del estado de alarma, el juzgado también se opuso. Argumentó que los acuerdos de la Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre servicios esenciales de la Administración de Justicia no afectan a las causas con preso: «La suspensión de trámite y plazos procesales no alcanza a los procedimientos y actuaciones con detenido ni a cualquier actuación en causa con preso, así como en general respecto de cualesquiera otras que resulten de naturaleza urgente e inaplazable relacionadas con medidas cautelares».
Entonces, el juzgado consideró que las medidas adoptadas por el CGPJ no afectaban a «la presente causa», que «no sufrió ninguna suspensión ni está sujeta a ninguna otra circunstancia excepcional que deba paralizarla o retrasarla».
Los juzgados también rechazaron la libertad provisional de otra reclusa preventiva, si bien su caso en más grave. Se trata de la joven que fue detenida por la Guardia Civil después de matar a su pareja durante una discusión en el estacionamiento de los apartamentos Don Pepe, en es Codolar.
