La policía argentina ha detenido a Jerónimo Figueroa, miembro de una banda organizada desarticulada por la Policía Nacional en abril de 2010 por intentar introducir en España más de 814 kilos de cocaína y 15.000 éxtasis cuyo destino era Ibiza y Barcelona dentro de un falso camión del rally Dakar en 2010, según informó ayer el diario ABC. Dos de los siete miembros de la organización criminal fueron arrestados en Vila y uno de ellos, ambos eran ibicencos, trabajaba como herrero y fabricó los dobles fondos del vehículo en el que se ocultaban las sustancias estupefacientes, según publicó entonces Diario de Ibiza.

Figueroa, que llevaba varios años fugado y utilizaba identidades falsas, fue descubierto cuando la policía acudió a una llamada que alertaba de un episodio de violencia de género en plena calle. Según la noticia publicada por ABC, en un primer momento el hombre se trató de confundir a la policía identificándose con un nombre falso. Más tarde, los agentes comprobaron que su identidad era la del buscado por narcotráfico Jerónimo Figueroa. En abril de 2010 la Policía Nacional intervino 814 kilogramos de cocaína que habían sido ocultados en 32 dobles fondos practicados en un camión 'tuneado' para simular su participación en el reciente rally París-Dakar 2010, según explicó entonces la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil.

El vehículo había sido totalmente transformado para adaptarlo a su supuesta participación en la competición, celebrada aquel año en Argentina, como camión-taller de apoyo y estaba serigrafiado con publicidad y los logotipos de la prueba. En esta operación, que contó con la colaboración de la Policía Federal Argentina, los agentes detuvieron en Bilbao, Barcelona e Ibiza a los siete miembros, todos españoles, de una de las redes más importantes de introducción de cocaína en la isla.

Además, en el piso que el jefe de la organización, T.M.B.T., poseía en Barcelona, se encontró una maleta preparada para su huida con documentación falsa argentina y 6.000 euros. En este registro, aparte de las pastillas de éxtasis y del hachís, los agentes intervinieron varias balanzas de precisión, las dos armas, munición y cargadores de pistola, entre otros efectos.