Josep Antoni Prats elige el entorno de la iglesia de Sant Francesc para hacer la foto. En un momento, identifica el mac de fer trons, la piedra donde los jóvenes descargaban sus armas antes de entrar a misa para evitar incidentes,y rememora que se tuvo que cambiar la ubicación del cementerio porque los cuerpos, junto a los estanques salineros, no se descomponían.

¿Cuántas veces ha sido candidato al Senado?

Creo que esta es la tercera vez.

A pesar de que ha dicho que el Senado sirve de poco o que, al menos, habría que reformarlo.

El Senado debería ser la Cámara territorial de verdad del Estado, el lugar donde los territorios pudieran manifestar los problemas que tuviesen y llegar a acuerdos. En un Estado que funcionase realmente bien, el Congreso sería más ágil y el Senado, la Cámara de debate entre los territorios como pasa en Alemania, en Italia o en Gran Bretaña. El problema es que las disputas políticas del Estado español han convertido al Senado en un sitio totalmente inútil, en una cámara de segunda lectura.

¿No están muy hartos de tanta convocatoria electoral?

Sí, y por eso hemos decidido no hacer campaña. Nosotros nos debemos presentar por responsabilidad porque somos una opción política bastante diferenciada de todas las otras. La gente que nos quiera votar debe tener la oportunidad de hacerlo, pero ha sido una grandísima irresponsabilidad que PSOE y Podemos no hayan sabido llegar a un acuerdo para formar gobierno cuando desde ERC les dimos la oportunidad a cambio de prácticamente nada. Deberían estar gobernando y arreglando las cosas y no lo han sabido hacer por personalismos y por excesos de cada uno, de querer imponer su opinión sobre la de otros. Ahora, les puede costar muy caro. Yo, si fuese un votante de PSOE o de Podemos estaría muy enfadado, por eso, animo a la gente a que vaya a votar porque no puede ser que por ese enfado acabe ganando el tripartito de derechas.

Las propuestas con las que se presenta, ¿son las mismas que hace unos meses?

Sí, trabajar por el patrimonio y llevar la voz de Ibiza y Formentera al Senado, que haya una voz propia de aquí y no sean solo partidos estatales los que tengan representación en Balears porque le está costando muy caro a la gente de las islas. Sin la representación propia en el Senado, siempre estamos dependiendo de aquello que digan los grandes partidos de Madrid. Si conseguimos llevar una voz a Madrid, será una voz independiente, propia y defensora de este territorio.

Este enfado general que hay entre la ciudadanía, ¿puede beneficiar a Esquerra y sacar más votos?

Yo siempre espero obtener más votos. Sé que, en otras ocasiones, hay gente que no nos votaría porque su voto sería más útil en contra de otro, es decir, votando a un partido para que no gane otro, y esto se ha demostrado que no sirve de nada. Nosotros salimos perdiendo siempre que gana cualquiera de los grandes partidos españoles.

¿Les puede afectar la situación que se vive en Cataluña?

Ya nos está afectando a todos y no hace falta ser ni catalanista ni independentista. La gran cuestión que plantea la sentencia del Tribunal Supremo es que las protestas pacíficas y los actos en contra del poder establecido deben ser juzgados durísimamente y si no vas a favor del pensamiento dominante puedes ser juzgado, acusado e ir a prisión. Ahora han caído unos líderes independentistas, pero podrían caer líderes feministas, ecologistas o líderes de cualquier 'ista' que al Supremo no le parezca bien. La sentencia ya nos está coartando la libertad de expresión y manifestación y toda una serie de libertades que nos habían hecho creer que teníamos.

¿Pero puede afectar a nivel de elecciones

No, la gente debe votar en consecuencia en cada momento. La gente sabe que defendemos: los Països Catalans, la identidad de nuestra tierra, de la lengua, la cultura y el territorio. La situación de Cataluña es una manifestación de cómo el Estado está siendo poco democrático y cómo los grandes partidos están llevando al Estado a un callejón sin salida en el que no hay manera de avanzar.Debe ser un momento de reflexión, para ir hacia otra situación y solo se arreglará con diálogo, consenso y con voluntad de todas las partes.

¿Cree que hay posibilidad de abrir aún una vía de diálogo?

Una persona tan poco sospechosa de ser independentista como el profesor Manuel Castells decía que solo había dos salidas: o diálogo o estado de excepción. Espero que la opción elegida no sea el estado de excepción y sí el diálogo. Hay partidos políticos, entidades y agentes que tienen la mano tendida desde hace tiempo. Es hora de que el Estado se siente y busque la manera de arreglar la situación.

El presidente en funciones ha comparado el soberanismo catalán con la ultraderecha española, ¿hay visos de diálogo?

Es lamentable pero en campaña se dicen cosas que la gente no piensa. Espero que la izquierda española sea racional y aplique aspectos de raciocinio en todas estas actuaciones y acepte que la única manera de solucionar un problema como el de Cataluña o cualquier otro es dialogar y adoptar soluciones democráticas.