El descuento aéreo del 75 por ciento «está garantizado». «Para todos los residentes y sin ningún tipo de distinción». Es el mensaje que dio ayer el Govern después de que la presidenta Francina Armengol contactara con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, después de que éste cuestionara desde la tribuna del Congreso la bonificación y asegurara que se estaban cruzando datos con Hacienda para controlar la renta de los usuarios del descuento, de aquellos que «viajan demasiado».
«Ya le he transmitido a Ábalos que el descuento de residente es un derecho colectivo que compensa el hecho de vivir en unas islas», informó a través de las redes la presidenta de la conversación con el ministro, señalando que «la desventaja la sufrimos todos y no tiene nada que ver con el nivel de renta». «Costó mucho conseguirlo y si hay que investigar a alguien es a quien sube los precios», apuntó.
Según la portavoz del Govern, Pilar Costa, en su comparecencia ante los medios después del Consell de Govern, desde primera hora de la mañana Armengol trató de ponerse en contacto con el ministro Ábalos, algo que consiguió a media mañana. En la conversación, según Costa, el ministro garantizó que «no habrá ningún cambio en el descuento de residentes». «El descuento está garantizado», trató de enviar un mensaje de calma la portavoz después de las palabras del ministro en el Congreso. Costa recordó, además que el descuento está garantizado y recogido en el Régimen Especial de Balears (REB)».
Sobre el cruce de datos con Hacienda para estudiar el nivel de renta de los residentes, la portavoz del Ejecutivo relató que el ministro aseguró que se trata de «un informe que se pide a la universidad sobre otras cuestiones de la utilización del descuento».
«No habrá ningún cambio en el descuento», insistió la portavoz del Govern, que explicó que en la conversación telefónica entre el ministro y la presidenta, también hablaron de «estudiar el comportamiento de los precios» y que, incluso, Ábalos estaría trabajando con la Comisión Europea para permitir establecer un máximo en los precios de los billetes que «no sería incompatible con el descuento del 75 por ciento». Es decir, una limitación en las diferentes tarifas para evitar que las aerolíneas puedan disparar sus precios indefinidamente en momentos de mayor demanda de billetes.
El conseller Pons pide una reunión
El conseller Pons pide una reunión
Costa informó también de que el conseller de Movilidad, Marc Pons, ya ha solicitado una reunión en Madrid con el ministerio para abordar el descuento de residente, en especial sobre el comportamiento de los precios por parte de las aerolíneas, y ese futuro tope en el coste de los billetes.
Fue el miércoles cuando desde la tribuna del Congreso, el ministro Ábalos generó sin ser muy consciente de ello un terremoto en Canarias y Balears, al cuestionar el descuento de residente. El ministro habló de «efectos perversos» y desveló que el ministerio estaba cruzando datos con la Agencia Tributaria para comprobar el nivel de renta de los beneficiados por la bonificación.
No es la primera vez, en apenas un año y medio, que el ministro Ábalos levanta polvareda en las islas a raíz del descuento de residente. Nada más llegar al cargo, en junio de 2018, el ministro retrasó la subida del descuento del 50 al 75 por ciento y amenazó con posponerlo medio año. La presión de Armengol y de Canarias, logró acortar entonces los plazos.
