Un incendio que se declaró ayer por la mañana en un piso de la quinta planta del bloque A del edificio Tanit de Sant Antoni puso en peligro a centenares de personas y obligó a desalojar a 250, entre ellas muchos niños. Finalmente, no hubo heridos de gravedad, aunque nueve personas resultaron afectadas. Ocho fueron atendidas por intoxicación por inhalación de humo y la otra, por una quemadura de segundo grado en un pie. (Ver imágenes del incendio)
Dos de ellos (dos hombres, uno de 31 años y nacionalidad colombiana y otro de 34 de Marruecos) fueron trasladados a Can Misses, donde quedaron ingresados, estables, pero bajo observación. Otro de los afectados fue conducido a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. Cuatro más fueron atendidos en el Centro de Salud de Sant Antoni y otros dos en el mismo lugar del incendio. Entre los afectados hay dos agentes de la Guardia Civil, como se aprecia en las imágenes.
Al parecer, señalaron fuentes policiales y de los bomberos, la persona que sufrió las quemaduras en un pie es el principal testigo del suceso, ya que reside en el piso en el que comenzó el fuego. Según declaró esta persona, el incendio tuvo su origen en una lámpara. «Al parecer el fuego se produjo cuando estaban manipulando una lámpara», explicó el jefe de los Bomberos, Miguel Sevilla. El fuego afectó muy gravemente a la vivienda en la que se originó y también, aunque en menor medida, a los dos pisos inmediatamente superiores.
En un principio, los bomberos y la Policía Local recibieron el aviso de que las personas de los pisos superiores, del sexto al undécimo, estaban atrapadas por el incendio. Pudieron ser desalojadas, pero no por las escaleras del bloque A, sino que se las condujo hasta el bloque B por «los laberínticos pasillos» que unen ambas partes del inmueble, según las propias palabras de los bomberos y de la Policía Local, y desde allí bajaron a la calle.
Por precaución también se desalojó el resto del edificio, aunque no al completo, porque en muchos pisos había niños pequeños y resultaba más seguro confinarlos en pisos seguros que bajarlos por las escaleras.
Los centenares de personas que viven en este monstruoso edificio, situado entre las calles Faro, General Balanzat y Del Mar, se vieron en la calle mientras los bomberos terminaban de apagar el fuego y un humo denso y negro no paraba de salir de las ventanas del piso en el que se originó el incendio.
«Yo vivo en el octavo piso del bloque A [tres plantas por encima] y [sobre las nueve de la mañana] empezamos a escuchar gritos. Mi mujer salió porque pensábamos que alguien se estaba peleando, vimos que había mucho humo y bajamos a la calle en pijama por el otro bloque», explicó ayer Víctor, uno de los vecinos.
«Nosotros escuchamos gritos y ruidos de puertas, no sabíamos qué pasaba, pero cuando vimos el humo ya comprendimos lo que ocurría», explica una pareja que, junto con sus dos perros, también esperaban en la calle para poder regresar a su casa. Finalmente, los vecinos pudieron regresar a sus casas a primera hora de la tarde. Al parecer, la estructura del inmueble no se vio afectada.
En el incendio y desalojo del edificio participaron decenas de personas. Además de los bomberos del Consell de Ibiza, que enviaron a diez especialistas, incluido el jefe del parque. También acudieron numerosos agentes de la Policía Local de Sant Antoni y de la Guardia Civil, además de voluntarios de la Protección Civil.
También acudieron al lugar el alcalde de la localidad, José Tur Cires, y la concejala de Gobernación, Aída Alcaraz.Da balcón a balcón
Un testigo del incendio, el escultor residente en Sant Antoni Pedro Hormigo, relató escasos minutos después de iniciarse el fuego, alrededor de las 9.15 horas de la mañana, que vio una fina columna de humo que salía del edificio y que daba la sensación de que era un incendio «importante».
Hormigo describió que el Passeig de ses Fonts, debido a la celebración de la Cursa des Porquet, estaba «repleto de gente», con guardias civiles y policías locales controlando el tráfico. «Estaba todo el edificio afectado por el humo», destacó el escultor, quien después de alertar a la Guardia Civil tuvo tiempo de grabar un vídeo que acompaña esta información. El escultor también dijo que vio cómo un vecino de uno de los pisos situados por encima de la vivienda incendiada cruzó de su terraza hasta el tejado para huir del humo. «Saltó de balcón a balcón», recordó Hormigo, que insistió en que el fuego estuvo «descontrolado durante un buen rato».
El de ayer ha sido el tercer incendio importante declarado en Sant Antoni en sólo diez días. El viernes por la mañana un fuego, cuyo origen no está claro -se habló de una vela encendida durante la noche-, causó destrozos importantes en el Hostal La Torre de Sant Antoni, sobre todo en el restaurante, la cocina y el porche, que quedaron destruidos. Los 20 huéspedes del hotel tuvieron que ser desalojados, si bien nadie resultó herido.
El viernes de la semana anterior, los bomberos tuvieron que apagar otro fuego éste cerca del hipódromo de Sant Rafel. Ocurrió en una casa de campo, que resultó bastante afectada, y al parecer el origen estuvo en una chispa que saltó desde la chimenea.
